Entre la visión que transmite JM y la de MarisaL hay una diferencia notable.

La que transmite fielmente JM es corporativa, la idealizada, bienintencionada y que no registra el iceberg que tiene delante el Opus Dei, creada por los superiores para consumo interno especialmente:

-          “Hay que estar animados”

-          Se espera que There be dragons sea un “impulso muy fuerte a la labor”

No termino de entender si el último párrafo sobre el pontificado de Benedicto XVI va dirigido a los de dentro que leen la web o a otras personas.

Los superiores de Villa Tevere saben perfectamente que el futuro no es prometedor de ninguna manera, pero tienen que negarlo de cualquier forma.

MarisaL, en cambio, se da cuenta de lo que pasa y de que es demasiado serio como para “estar animados” y poner las esperanzas en There be dragons. En "tiempos del fundador" hubiera sido una herejía poner las esperanzas en un film. Eso demuestra una vez más la decadencia: el Opus Dei ha perdido fuerza por sí mismo y necesita "medios externos" para darse impulso.

Ya me gustaría que MarisaL ampliara su visión de la actualidad del Opus Dei.

Saludos,
E.B.E.