De la siguiente información, he omitido las iniciales y referencias de los sacerdotes.

Un abrazo,

Agustina

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“El opus y su gente no paran de recibir golpes propinados por presbíteros numerarios en Argentina.

[…]

Sin mediar demasiados trámites, varios de estos sacerdotes y ex sacerdotes o quizás todos, recibirán una compensación económica de por vida por los servicios prestados a la prelatura. En algunos casos fue la prelatura la que se adelantó y ofreció el dinero.

Opuslibros puede atribuirse parte del éxito en conseguir que los ex curas sean compensados económicamente. Aunque también influye que el opus quiere evitar litigios con sus ex sacerdotes e impedir que haya más casos de querellas presentadas ante la Congregación del Clero en el Vaticano. Que las hubo y las hay...

Ese tema no ha cambiado esencialmente en nada; lo han maquillado para engañar a la Santa Sede y a los obispos. A Javi Echevarría lo desvela una posible intervención papal.

Lo relacionado con la dirección espiritual, el fuero externo y el gobierno del opus, fue asunto prioritario en el congreso general de abril de 2010 y en la convivencia de vicarios de diciembre de 2010.

Los vicarios volvieron repitiendo como autómatas: “Juan Pablo II dijo que el opus dei tiene el carisma de la dirección espiritual”, pretendiendo que JPII justificó así “el modo” de “hacer la dirección espiritual en lo obra”, argumento de autoridad que no convence a nadie y ha indignado a muchos.

Mientras tanto, Echevarría y sus ayudantes inventan fórmulas para engañar al Papa y a los obispos y a los propios del opus, diciendo, por ejemplo, “nuestro padre nunca nos indicó hablar en la charla de la materia de nuestras confesiones”. Quienes hemos estado dentro sabemos que mienten.

Otra “novedad” es que si alguien cuenta algo “delicado” en la “charla fraterna”, quien le oye deberá decirle: “¿lo cuentas tú o lo cuento yo a la delegación? Si lo cuentas tú, cuando lo hagas me lo dices”. Y para más hipocresía repiten como loros: “contamos las cosas porque se nos da la gana”, mientras continúan coaccionando conciencias y el fuero interno se sigue ventilando.

Los informes de conciencia sobre los socios se siguen haciendo, con la salvedad de que no deben registrar ninguna referencia “ofensiva o delicada”. Pero el director/a, si conoce algo “delicado” de alguien, lo contará por escrito, de puño y letra, y lo enviará en un sobre cerrado, distinto al del correo habitual, dirigido a los vicarios.

No es novedad que en Buenos Aires, por falta de numerarios se cerró hace años el centro llamado “Clay”. Por el momento, lo han reabierto, y viven allí algunos numerarios y residentes de la residencia universitaria “Los Aleros”. Los Aleros están en obras, y se están gastando una millonada en refacciones.

Este año se cierra “Plaza”, los dos pisos del ex centro se alquilarán a una empresa comercial o a un estudio de abogados. Los pocos residentes (6 ó 7) que quedan en él, vivirán en el edificio del centro de estudios, llamado CUDES. El CUDES tiene cien plazas y sólo hay 14 numerarios haciendo el centro de estudios. Adaptar dos pisos del CUDES, para los 7 residentes “mayores” que abandonarán Plaza, ha costado 200.000 dólares.

Se van los curas y los laicos, no “pita” casi nadie, pero el dinero abunda. ¿Pobreza de los primeros tiempos?”