En relación con lo que se comenta de plantear la crisis vocacional a menores de 14.5 años, recuerdo que mis últimos años dentro de la obra, en las reuniones anuales que se hacía de lo que se conoce como la labor de san rafael, para cuando se hacía el planteamiento para pitar, se decía que se estaba llegando tarde, por lo que había que adelantarse, aplicando aquello de "llegar a tiempo, estar de vuelta y saber trigonometría".

El comentario era más en el sentido de que debían asegurarse a los muchachos un ambiente sano y alejado de los peligros del mundo, que dificultarían que dieran un sí al tener la edad suficiente. Pero no dudo que ante el rotundo fracaso de la intención de obtener 500 vocaciones de numerarios en año, se cambiara a una estrategia aun más agresiva de captación.

Lo que es un hecho para mí es que ante la vertiginosa evolución de las redes sociales y la facilidad de encontrar información en Internet, cada vez les será más difícil que la gente se apunte al proyecto sin conocer a lo que va (salvo aquellos ciegos que ya no pueden o no quieren ver).

Arnust