normalito :
Me han hecho
mucha gracia las aportaciones sobre
los vehículos de los prelados, vicarios, fundadores y demás cuerpo
dignatario del Opus Dei. Es como si el lujo fuera inherente a ellos, pues el
cargo que se auto otorgó Escribá y sus grandilocuencias se les pegó como mosca
en la miel.
Puedo decir
que durante la visita que el actual prelado hizo por España hace
aproximadamente un año, se paseó con un Audi A8, negro y con blindaje de nivel medio.
No me pareció que le viniera grande, muy al contrario, se encontraba como pez en
el agua, o así me lo pareció, pues lo vi muy de cerca. Se notaba que eso era lo
suyo, muy a su medida.
Se me ocurre
que eso es como cuando se dice y se acierta que lo mejor no es tener un yate,
si no que lo mejor es tener un buen amigo que tenga uno. Es la manera de
disfrutarlo sin tener remordimientos de conciencia. La propiedad ya se ocupa de
todo, uno se ocupa solo de usarlo y disfrutarlo. También de contarlo, que para
eso uno es amigo, socio o cómplice del jefe o anfitrión y si ese es Dios ya ni
te cuento.
Recuerdo
ahora el paseo de Escribá en un yate de gran lujo en una de sus visitas a
Barcelona, el yate de Federico Vallet, un acaudalado constructor, allá por la
década de los 60. Nos lo contaba mi padre, pues él mismo formaba parte de la
comitiva, aunque para su desgracia no pudo ser admitido a bordo. Si hay dudas
al respecto puedo aportar foto, por si acaso.
En fin, a
ver si el Papa Francisco les da un buen repaso evangélico y les propone que
viajen en burro y no en carroza.
Saludos cordiales,
Normalito
Publicado el Friday, 02 August 2013
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