Preguntas en el aire (I)

Sobre la prolongada residencia de Escrivá fuera de su diócesis (1927-1942)

1) Cuando pedí la admisión en el Opus Dei hacía poco que había fallecido Escrivá y se iban difundiendo poco a poco anécdotas sobre su vida y determinados acontecimientos extraordinarios como por ejemplo los actos fundacionales de 1928, 1930 y 1943.

Por aquel entonces yo imaginaba que Escrivá pertenecía a la diócesis de Madrid, donde se encontraba el 2 de octubre de 1928, y que su obispo era Leopoldo Eijo y Garay. Creo recordar, aunque no estoy totalmente seguro, de que en alguna película de tertulias se refería a él como mi Obispo o mi Prelado...

Muchos años después de dejar el Opus Dei he sabido que sorprendentemente no quedó incardinado en la diócesis de Madrid hasta el 11 de noviembre de 1942 (ver página 37 de El itinerario Jurídico del Opus Dei).

Jaume García Moles explica como inicialmente pertenecía a la diócesis de Barbastro, donde nació. Luego, el 12 de noviembre de 1918, obtuvo la incardinación en la diócesis de Calahorra como seminarista. Más tarde, el 18 de julio de 1920, consiguió, por un procedimiento que no queda suficientemente claro, la incardinación, también como seminarista, en la diócesis de Zaragoza, donde luego se ordenó sacerdote.

El 17 de marzo de 1927 obtuvo del obispo de Zaragoza, don Rigoberto Doménech Valls, un permiso de dos años para trasladarse a Madrid con objeto de realizar su tesis doctoral en derecho, pero al estallar la Guerra civil en julio de 1936 (más de nueve años después de aquel permiso) todavía no había conseguido el doctorado. Y ahora viene la primera pregunta:

¿Cuándo y cómo fue renovado aquel permiso de dos años y por qué motivos?

Parecen lógicas una o dos prórrogas breves justificadas en su caso por determinadas dificultades, pero supuestos progresos firmes en su tesis. Desconozco completamente si este permiso fue renovado, cuántas veces y en qué condiciones.

2) Una vez desatada la Guerra civil y la persecución religiosa todo cambia radicalmente. Se ve obligado a refugiarse en diversos lugares (sanatorio del Dr. Suils, Legación de Honduras, etc.) y finalmente escapa a la otra zona de España.

Después de pasar por Andorra y Francia (estuvo en Lurdes) entra en España el 11 de diciembre de 1937. En ese momento ambos bandos contendientes se encontraban en una cierta situación de equilibrio de fuerzas y el final de la guerra se preveía lejano. Y aquí surge una segunda pregunta:

¿Por qué se quedó en Burgos y no acudió a su propia diócesis de Zaragoza?

Zaragoza se encontraba libre de la persecución religiosa, Escrivá estaba incardinado allí y el permiso para residir en Madrid carecía de objeto, pues ni podía acudir allí sin peligro de su vida (precisamente había huido de Madrid) ni la universidad española se encontraba en condiciones de preparar ninguna tesis doctoral (de hecho estuvieron sin actividad durante casi toda la guerra).

Con una mentalidad "Opus Dei" existe aparentemente una justificación clara: ya había fundado la Obra y debía trabajar en ello. La "voluntad explícita" de Dios es más importante que la normativa del Derecho canónico o la voluntad de un "simple" obispo. Pero en realidad la conclusión lógica es la contraria: el permiso carecía de objeto y ahora debía reintegrarse a su diócesis; parece que quisiera vivir siempre en "la capital" (Burgos era entonces la capital de la otra zona de España).

¿Es posible que contara con el consentimiento expreso de don Rigoberto Doménech? Tampoco conozco nada al respecto.

3) Pero sigamos, acaba la guerra, en abril de 1939 Escrivá llega a Madrid, y por fin el 18 de diciembre de 1939 se doctora en Derecho con su tesis sobre la Abadesa de las Huelgas, tal como detalla Oráculo en su reciente e interesante estudio. Y aquí surge la tercera pregunta.

¿Por qué una vez obtenida su tesis doctoral no se reintegró a la diócesis en donde estaba incardinado y siguió en Madrid durante otros tres años?

Había obtenido su título de doctor y ya no había motivo para seguir fuera de su diócesis. ¿Tuvo algún permiso adicional de don Rigoberto Doménech; con qué motivo? Recordemos que la incardinación en Madrid no tuvo lugar hasta el día 11 de noviembre de 1942 cuando es nombrado formalmente Rector del Patronato de Santa Isabel.

Simplicio