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Sí Ana sí, por desgracia en nuestra Iglesia, nos encontramos pequeños grupos de control mental y manipulación de la persona. Es curioso que en nuestra Iglesia, encontramos los dos extremos, desde parroquias/movimientos de lo más laxo a parroquias/movimientos de lo más talibán. Se puede decir que en la Iglesia siempre encontrarás un cura que te diga lo que quieras oír. Y muchas veces las personas van a su encuentro.
Por suerte o por desgracia, siendo compañero de viaje, he ido conociendo movimientos, órdenes o lo que sean, de lo más radical y manipulador y tengo que decir que el opus dei no se lleva el primer premio. Estos movimientos, con gran efervescencia inicial y suelen ser juveniles, fueron aparaguados por Juan Pablo II (este personaje da para escribir ríos de tinta), creando en cierta medida un mercado de manipulación, culpabilidad y de control mental. Estas parasectas, crean mucho mal a las almas pensantes, idealizadoras y bien intencionadas, ya que se muestran como lo “auténtico” y al final acaban siendo programadores de personas. De la quema tampoco se libran los movimientos “laxos”, también crean su parasecta despreciando en cierta medida a los que son más “radicales” o diferentes a ellos. Yo aún no he visto en la iglesia una entidad o movimiento que acepte todos los carismas, siempre se cojea de un lado u otro. C’est la vie.
Este mal endémico puede que mate la Iglesia o al menos, la puede dejar muy tocada, de todas formas Dios sabe más y nos da la libertad de elegir.
Lo único y lo más importante, es saber elegir bien sin que nos engañen.
Un saludo a tod@s
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Publicado el Monday, 24 July 2017
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