Solidarizándome tanto con el presunto abusador como con la víctima de los abusos sexuales, sigo el "caso Gaztelueta" a través de los medios de comunicación con mucha expectación, en el buen sentido de la palabra ("inquietud u otra emoción intensa que produce la espera de una cosa de interés o curiosidad, en especial cuando son muchos los que la esperan").

También leo la web que el colegio Gaztelueta ha creado "para que las personas interesadas puedan consultar todo lo relacionado con este proceso judicial". Consultar la web de Gaztelueta para enterarse de lo que está pasando en el juicio me ha resultado casi tan absurdo como leer la revista Crónica para saber lo que ocurre en el mundo.  Tengo la impresión de que la web de Gaztelueta esconde alguna intención no declarada abiertamente. La sospecha nace porque está plagada de afirmaciones que ponen en duda la versión de la víctima y la honorabilidad de la familia del denunciante.  En Gaztelueta no son objetivos. Claro, que si nos ponemos en sus zapatos, a cualquiera de nosotros nos ocurriría lo mismo. Nadie puede ser juez y parte en causa propia.

"caso gaztelueta punto com" tiene forma de aviso a navegantes. Con esa web, el Opus Dei crea un precedente muy perjudicial para otras posibles víctimas que pudiera haber en los muchos colegios o clubes juveniles del Opus Dei. Si hay más "casos Gaztelueta" escondidos que aún no han salido a la luz, las posibles víctimas ya saben a qué atenerse. Se sentirán amordazadas para denunciar. Si lo hacen, todo el poderío de la "maquinaria Opus" se pondrá en su contra.

"caso gaztelueta punto com" no oculta que su información es sesgada, y lo dicen: "Recogemos algunos materiales que reúnen datos y aportan contexto sobre el caso". Advierten que sólo publican lo que interesa ("algunos materiales").

Según "caso gaztelueta punto com" lo que publican proviene de "hechos sucedidos en el ámbito escolar contrastados a través de testimonios".  ¿El juicio no es precisamente para "contrastar" si los "hechos sucedidos" en el ámbito escolar (los abusos sexuales a un menor) existieron realmente?

En "caso gaztelueta punto com" no aceptan el juicio porque parten de un pre-juicio: los "hechos denunciados" son falsos; ellos tienen la verdad, y la verdad para ellos es "los hechos contrastados a través de testimonios".  ¿Cómo no va a estar el Opus Dei en posesión de la verdad? Iría contra el propio espíritu del Opus Dei dar credibilidad a la denuncia de un menor que ha sido sexualmente abusado antes que al testimonio de un numerario. "Creo más en la palabra de un hijo mío que en la de cien notarios juntos y unánimes", dirá en diferentes ocasiones Escrivá de Balaguer, según recoge Pilar Urbano en su biografía sobre el santo.

Lógicamente, Gaztelueta es parte interesada en que su profesor no sea condenado, y por tanto en que quede claro anticipadamente que los "hechos sucedidos en el ambito escolar contrastados a través de testimonios" es que los abusos no existieron, que el profesor acusado es en realidad un santo en vida y que todo este juicio es un montaje de la familia de la presunta víctima. Pensar de otro modo sería ir contra el espíritu del Opus Dei, o al menos, actuar de forma diametralmente opuesta a como lo hizo Escribá de Balaguer.

Según lo que informa la otra prensa, la profesional, parece que es un "hecho contrastado" algo de lo que no da cuenta "caso gaztelueta punto com" y es que los filtros de Gaztelueta que impedían acceder desde los ordenadores del colegio a páginas de internet con contenido sexual no funcionaban bien. Hemos leído en un periódico: "La letrada Leticia de la Hoz, ha mostrado un documento que indica que en el rastreo informático aparecieron evidencias de que Martínez Sanz buscó material de la actriz coprotagonista de ‘Harry Potter’, Emma Watson, “desnuda” e incluso “violada”. Consta igualmente un archivo de imagen con extensión .jpg llamado “emmawatsondesnuda”. Se da la circunstancia de que el denunciante había referido que ésa era una de las mujeres que le había mostrado en sus sesiones en el despacho".

Sobre las excesivas salidas de clase de la víctima para "hacer" tutoría con el profesor presunto abusador, o para otro tipo de encuentros, recoge una publicación: "La abogada De la Hoz ha llamado la atención sobre el hecho de que el acusado se defendiera alegando que le ofrecía en esas reuniones “clases particulares” de Matemáticas o Lengua para que pudiera sacar el curso. Ha recordado que era “licenciado en Historia” y que era anormal que sacara al joven de una clase con el profesor de Matemáticas para ayudarle con una materia que no era su especialidad. El exdirector Cires ha admitido que no debería ser una forma de actuar habitual". Nada de esto se nos cuenta tampoco en "caso gaztelueta punto com". Al contrario, la web oficial transmite un mensaje de serenidad, edulcorado con una pátina de triunfalismo soterrado, como diciendo al lector: "tranquilo, que esto lo vamos a ganar. El denunciante es un mentiroso, sus padres unos ruínes, y nuestra verdad triunfará".

Mucho me temo que "caso gaztelueta punto com" es un producto de uso "interno" elaborado, antes que para informar al público en general, para adoctrinar al "mundo Opus". Conociendo cómo funcionan los entresijos de la Prelatura, es razonable que esa web se haya ideado como un lugar de obligada lectura para los miembros y miembras de la Prelatura, expectantes como yo, de saber lo que está pasando, y sobre todo para las profesoras y profesores de colegios y colegias del Opus. De esa forma se evita "el peligro" de que las personas de la Obra acudan a otras fuentes de información donde encuentren detalles escabrosos más propios de la vida del sádico protagonista de una película pornopedófila, e impropios de un numerario del Opus Dei que cada semana se examina en público sobre lo que pueda desdecir del cargo y posición que ocupa.

En cualquier caso, nadie saldrá beneficiado del resultado de este juicio. Personalmente deseo que si los abusos no existieron, sea absuelto el profesor y se haga lo necesario para resarcirle por el suplicio que habrán pasado él y su familia en estos diez largos años; pero que si el denunciante fue realmente víctima de los atroces hechos que ha narrado ("hechos contrastados"), que caiga sobre el profesor y el colegio Gaztelueta todo el peso de la ley.  En uno y otro caso, ojalá que ambos, víctima denunciante y presunto abusador, emprendan el camino de regreso hacia su reconstrucción como personas, porque lo que es obvio es que ambos, y sus entornos familiares, están destrozados. Pero esto al Opus Dei, desgraciadamente, debe importarle muy poco.

Portiyazo