webmaster :
EL NIÑO PERDIDO Y HALLADO EN EL TEMPLO José María Escrivá, 8-VII-1937
Del tomo de meditaciones internas “Crecer para adentro”, páginas 191-198 Roma, 1997
1) La composición de lugar de nuestra oración de hoy será imaginarnos a Jesús adolescente, annorum duodecim, como nos transmite el Evangelio (186), a la edad de doce años. Nuestra petición: aprender la lección que nos da como Maestro.
San Lucas nos relata que, habiendo subido Jesús con su Madre y San José a Jerusalén para el día de la fiesta, acabada ésta, remansit puer Iesus in Ierusalem, et non cognoverunt parentes eius (187); se quedó en Jerusalén y sus padres no lo advirtieron. Ha llegado solamente a los doce años nuestro Maestro, ¡y cómo procede! ¡Qué maravillosa discreción la suya! A nadie comunica, ni a sus padres, su plan para cumplir la Voluntad de Dios. Es de suponer que en el cariño de su Madre hubiera encontrado un obstáculo para realizarlo: quizá Ella no le hubiera permitido andar solo durante tres días por Jerusalén. Jesús calla y obra según la Voluntad de su Padre celestial...
Leer artículo completo
Publicado el Thursday, 23 March 2006
|