En su nota del otro día se quejaba Emeve de que no se hiciera a sus escritos el caso que ella creen que merecen. Un par de observaciones:

1) Nadie obliga a Emeve a escribir y publicar en esta web. Si no quiere cosechar indiferencias o rechazos, que escriba solamente a sus amistades íntimas o que se quede calladita. Si los escritos de Emeve no despiertan los ecos que ella desearía, qué le vamos a hacer... Tampoco a mí me hacen caso, pero entiendo que nadie es moneda de oro que a todo el mundo guste.

2) Cuando Emeve se refiere a “los más renombrados y célebres escritores de opuslibros” y juzga tan ricamente a “los muy intelectuales que no oyen al corazón y por tanto no logran ser ni hacer feliz a nadie”, parece estar creándose a medida unos oponentes que no existen (eso se llama ir de víctima por la vida). Y sin embargo tengo la impresión de que todos y cada uno de los que aquí escriben lo hacen desde lo profundo de su conciencia y de la manera en que saben hacerlo. Dudo de que nadie elija ser “intelectual” o “afectivo” en sus escritos enviados a la web, según la gratuita clasificación de Emeve; y menos aún para hacerla de menos a ella por ser mujer.

Nemo2