Querida Nadie:

Aunque desde hace varios meses leo esta web con verdadero interés porque no me quiero perder nada, es la primera vez que envío unas líneas. Te conozco y viendo tu interés por una uruguaya tan querida por muchas, no quise dejar de contestar tu pedido, aunque también me hubiese gustado poder darte buenas noticias ...

Esa persona tan querida falleció en el verano del año 2000, escuché que de una neurisma cerebral, es decir que todo fue muy rápido e inesperado. Antes de eso vivió muchos años de felicidad porque logró formar un lindo hogar con 4 hijos a los que disfrutó mucho por esa capacidad tan especial que tenía de querer a la gente. Las que supimos más de su vida estamos seguras que fue feliz. Las hermanas que siguieron en la obra ocupan "cargos" importantes, el hermano no lo sé. En el 2000 el prelado fue a hacer su curso anual a la Argentina y por eso mucha gente se movilizó para ir a escuchar sus aburridísimas tertulias, entre ellas las uruguayas, allí pude ver cómo muchas argentinas se acercaron a la hermana mayor para hacerle llegar sus pésames, pero en este caso me pareció percibir que lo hacían con verdadero cariño y no por cumplir con sus terribles vademecums y "criterios".

A partir de ese año la labor en Uruguay sufrió duros golpes, seguramente alguno de los lectores estará más y mejor informado. Además de la partida de varios y varias, la emblemática familia Peirano cayó en desgracia, varios acabaron en la cárcel, entre ellos un numerario y un supernumerario, se los acusó de fraude por la quiebra de un banco. Todo eso produjo un gran malestar interno porque algunos de los que perdieron su capital por la quiebra de ese banco, también eran del opus, fue terrible. Con tal motivo el prelado volvió a la Argentina el año 2002 y durante un día se desplazó hacia Montevideo para visitar a "sus hijos" en la cárcel. Perdón que haya salido con este largo cuento que ni pensaba agregarlo, pero lo fui uniendo por las fechas y porque de verdad pienso que desde el 2000 que no levantan cabeza los del opus en Uruguay. Aunque me consta que hay gente buenísima (pienso que engañada), otra gente buenísima se fue y otro tanto lo sigue haciendo, como en todas partes.

No te imaginas la gran alegría que me dio encontrarte por estos "lares", siempre te recordé y pensé que no nos volveríamos a encontrar. Aprovecho para agradecer a Agustina esta "creación" que ayuda a recrear la vida de tantas personas. Qué suerte que vivimos en el siglo XXI!!!, qué haríamos los ex sin internet y sin esta web que logra hacer posibles tantas cosas buenas.

Si quieres comunicarte conmigo, pídele la dirección a Agustina, tienes mi mail abierto. Un fuerte abrazo.

Celeste