Se puede oír en este enlace de Radio Euskadi.
Recomiendo escucharla para que nos hagamos idea de cómo lo está pasando esta familia, además de los daños -ójala que no irreparables- de su hijo (el interés del preceptor por inculcarle "la vocación de numerario" comenzó cuando tenía 13 años, el chaval tiene ahora 16). Y que la escuchen también los directores, tanto del colegio como de la prelatura, para que no sigan mintiendo ni encubriendo.
Agustina L. de los Mozos