Llevo muchos años de conocimiento de la página Opuslibros, la leo desde que
empezó estamos hablando de comienzos del presente siglo. Como es de suponer,
durante estos años ha habido períodos muy diferentes en cuanto mi apreciación.
Lo que queda en pie es lo que otras veces he expresado, me duele y pido
perdón por el sufrimiento que algunos que pertenecieron a la Obra pudieron
pasar por diferentes motivos. Por otras parte, me indigna ciertos artículos o
testimonios que rebasan mentiras, exageraciones y a la vista está que lo que
desean es hacer daño al Opus Dei y a las personas que pertenecemos al Opus Dei.
Hay artículos, cuyos autores denotan creerse dueños de la historia, y dicen
y desdicen, y colocan datos, precisos o imprecisos pero los colocan, las únicas
fuentes, si es que las hay, son lo que escucharon de tercera mano o son sus
propias conclusiones y se inventan hechos y situaciones que dicen haber vivido
en primera persona pero jamás existieron en la mayoría de las veces. Estos artículos,
de los que está llena la web, ni los miro, ahora, porque ya los miré demasiado
y he podido comprobar que todos terminan igual tienen el mismo corte y no son
auténticos.
Obsesiones. Demasiadas obsesiones sin fundamento actual, hay en Opuslibros.
Voy a mencionar sólo algunas a modo de ejemplo:
-reclutamiento de menores para formar parte de las filas del Opus Dei.
Obsesión número uno.
-empastillamiento para perseverar en la vocación de entrega a Dios.
Obsesión número dos.
-equivocación del Vaticano al proclamar santo a san Josemaría y
equivocación del Vaticano al iniciar el proceso de beatificación de su sucesor
don Alvaro del Portillo. Obsesión número tres.
-en esta película, todos los representantes de la Obra, me refiero a
nuestro Padre, a su sucesor, al actual Prelado y a otros miembros de especial
relevancia o de no relevancia, son los malos, están llenos de todos los vicios
inimaginables, deberían ser los perdedores (pero resulta que no es así, y eso
les pica mucho). Obsesión número cuatro.
Digo que ahora es distinto. Y lo digo por lo que puedo apreciar muy
cercanamente y puedo comparar lo que se escribe en la web y lo que yo miro con
mis propios ojos hoy, ahora. En primer lugar la media de edad de quienes
escriben es ¿45 años?, no creo que la media sea ni 20, ni 25, ni 30 años, por
lo tanto estamos hablando de unos modos y formas existentes en el Opus Dei del
siglo pasado o sea de 1999 para abajo, ¿sí o no? Bueno, yo les digo que ahora
todo es diferente, el aire que se respira es totalmente distinto en todos los
puntos que Opuslibros tiene, llamados por mí, “obsesivos”.
HOY, una numeraria a los 18 años (que es la edad de pertenencia a la Obra)
sabe muy bien a lo que viene, no hay ningún secreto, ni engaño (según ustedes,
porque que yo sepa nunca ha habido engaños en el Opus Dei) y una Aspirante de
14 años sabe muy bien que NO pertenece al Opus Dei y si quiere ser Aspirante lo
hace con el EXPRESO permiso de sus padres de lo contrario NO se le acepta el
pedido. Qué distinto, qué diferente a lo que se vivió, a lo que vivimos en los
años 60, 70, 80 y 90, en los que, reconozco, cabía la posibilidad de
equivocarse por inexperiencia ¿no? Pues bien, yo hablo de AHORA, y en
Opuslibros se sigue hablado de cómo era hace 40 años!!!! Estoy viendo venir a
galope la contraria, muchos me dirán seguramente, “yo pité el año pasado
y me siento engañada…”, y yo le diré pues mira, no te lo creo. Repito, ahora se
respiran otros aires. Estamos en pleno siglo 21!!! Los débiles de carácter no
pueden pertenecer al Opus Dei, se necesita gente madura, que sabe lo que
quiere, que tiene a Dios como el motor de su vida, gente que sabe lo que es
amar y entregarse!!! Me atrevo a afirmar que si no es así, el Opus Dei está
demás para aquellos incapaces de ponerse unas metas grandes en sus vidas. ¿El
cristianismo no nos enseña a amar a Jesús con toda el alma y seguirle? Esto
implica madurez, valentía, capacidad grande de amar o sea que no se le pide
nada nuevo e inalcanzable a la persona que quiere pertenecer a la Obra, se le
pide lo que se le pide a cualquier cristiano católico.
Es imposible que HOY alguien pueda sentirse engañado, con los medios de
comunicación, las redes sociales, la tecnología y la globalización, ningún
joven, ellos menos que nadie!! Pueden sentirse engañados, no me lo pueden
negar.
Todo lo demás cae por su propio peso. HOY, no se empastilla a nadie. Quien
necesita un tratamiento psiquiátrico lo tiene con el médico de su confianza
(sea o no de la Obra) y si no desea tomar pastillas, no las toma. HOY no se
impone nada. Y así podría seguir con cada uno de los temas tan cacareados en
Opuslibros. Ustedes comprenderán que es muy difícil dar una respuesta a cada
uno de ellos, no porque no la haya, lo que falta es tiempo.
Un saludo a cada uno
Calandria