La prelatura del Opus Dei ha superado la velocidad de
la luz en responder al trabajo
de investigación de Marcus Tank. Rauda y veloz, la
periodista Pilar Urbano (3.04.2014), sacerdotisa de la prelatura
personal, ni siquiera se ha esperado a leer las tres últimas entregas del
ignoto Marcus Tank. Parafraseando el título de una obra teatral de José María
Pemán, se la podría calificar de “la divina impaciente”, pues las tres últimas
aportaciones de Tank también contienen información de calado que Urbano no
debería haber pasado por alto. Me sorprende muy mucho que de repente la
prelatura, a través de su sacerdotisa, desclasifique un manuscrito de Álvaro
del Portillo (1961), hasta ahora inédito y anotado por unas líneas de Javier
Echevarría (1994): ¿por qué no se ha publicado años antes?, ¿por qué han
esperado a Marcus Tank para sacarlo a la luz? Doy la enhorabuena a este ignoto
investigador porque ha sabido lograr del propio Opus, sin habérsela siquiera
solicitado, una valiosa información documental que sin duda vendrá muy bien a
su línea de investigación. En vez de desmontar las tesis de Tank, la periodista
Urbano las ha reforzado.
La pregunta que espontáneamente surge tras la lectura
del artículo de Urbano es: ¿a qué se debe el interés manifiesto de omitir en
las obras hagiográficas de Sanjosemaría, hasta ahora publicadas por la
prelatura, la cuestión espinosa de sus esfuerzos por ser obispo, que se
remontan al año 1942? No hay que ser muy sagaz para entrever que en esta
delicada cuestión hay gato encerrado. El propio del Portillo ya tuvo que
domeñar ese gato en vida de Escrivá, como se deduce del autógrafo de del
Portillo (29 de diciembre de 1961) aportado por Urbano, que fue rubricado por
Javier Echevarría el 2 de diciembre de 1994 con la intención de que no quedaran
cabos sueltos. Y, sin embargo, quedan sueltos, es más, el gato se les ha
escapado.
Hay que seguir investigando esta cuestión, por mucho
que desagrade a los gerifaltes de la Obra de Escrivá y a sus hagiógrafos, entre
los que se cuenta Urbano, autora de El hombre de Villa Tevere. ¿Qué
hechos históricos pretendían ocultar o retocar del Portillo en 1961 y
Echevarría en 1994 con sus anotaciones manuscritas a fin de salvaguardar la
“santidad” del fundador? La tarea de investigación se vuelve emocionante, casi
policíaca.
Los superiores del Opus han proporcionado a Urbano un
documento que a primera vista favorece la historiografía oficial de la
prelatura. Pero ¿es ésa toda la documentación existente sobre las aspiraciones
de Escrivá al episcopado? Urbano puede haber sido objeto de manipulación por
parte de sus superiores por cuanto éstos pueden haberle ocultado documentación
comprometedora, o bien ella no ha tenido el valor de consultar otros archivos para
encontrar pruebas fiables que contradigan la versión oficial de la Obra de
Escrivá.
Pasando al terreno secundario de los argumentos ad
hominem –en este caso ad mulierem–, no es nada ignoto en la sociedad
española el afán de notoriedad de doña Pilar Urbano, que ha intentado
ensombrecer la figura del Rey Juan Carlos, en su reciente libro sobre Adolfo
Suárez, mediante argumentos o pruebas que no llegan ni de lejos a la solidez de
los aportados por Tank acerca del episcopable Escrivá. Urbano sólo ha recibido
merecidas descalificaciones por parte de numerosos periodistas e historiadores
a raíz de su infundada osadía. Pero ella es de esas personas a quienes gusta la
gresca, que se complacen de recibir ataques y vituperios de sus adversarios.
Sentir el odio ajeno es un modo muy peculiar de sentirse feliz. Se entiende,
pues, que las directoras del Opus, aprovechándose de tan extremo y polémico
afán de notoriedad, se hayan servido de ella y de su “prestigio” como ariete
contra Marcus Tank.
En un solo aspecto estoy de acuerdo con la periodista
Urbano. Convendría que este trabajo de investigación se abordara sin el amparo
del anonimato y de los pseudónimos. Es acertada la sugerencia que hace pocos
meses alguien lanzó en este “blog grupal”, por emplear el término de Urbano, de
que ex miembros del Opus organicen en Roma o en otro lugar un congreso
universitario sobre la realidad grupal del Opus Dei. En ese congreso podría
analizarse, entre otros temas, la cuestión histórico-biográfica de la promoción
al episcopado de Escrivá, incluyendo las razones por las que este proyecto se
frustró.
Josef Knecht