Respondo a Ebe sobre su pregunta sobre si hay cambios en  la dirección espiritual.

Poco cambio real, mucho ruido y pocas nueces. No se elige con quien hablas, ni cura ni laico. En las convivencias de directoras, celadoras, no hacen la charla con las personas de la delegación. En las de supernumerarias no hacen tampoco la charla pero... sigue habiendo despachos y consejos locales donde se habla de las personas. Solo si preocupan...  ¿quién decide si preocupan?...

También todas las personas que llevan charlas, hablan con la directora directamente si alguien les preocupa por lo que le ha contado o por su actitud y a la persona que preocupa se le dice que ella llame a la delegacion para hablar con la que corresponda... Pero si dice que no, que no se atreve... se le dice: le llamo yo de tu parte si quieres y le digo que quieres verle,  te parece? Y ya sabeis la respuesta.

Las directoras van solas a hablar con la vocal de la delegación. Solas para comentar lo que les preocupa... Como veis lo mismo pero más discreto.

Los sacerdotes, si les da permiso la persona, pregunta para contestarle más concreto... Siguen teniendo que informar de numero de confesiones de numerarias/os; supernumerarias/os, agregadas/os y fieles. Así pues, sigue lo mismo... pero con más doblez, porque ahora se convence con buenas palabras:  Yo le digo que tú quieres que le diga, yo te facilito.... pregunto y te digo....

Opinad vosotros si huele a sanidad o más putrefacción.

Junio