El camino incierto. Respuesta a dudas.- Dionisio
Fecha Friday, 29 May 2015
Tema 040. Después de marcharse


Querida dudas:

Ya te he contestado privadamente, pero posiblemente otras personas puedan verle alguna utilidad a los consejos que te he dado. Es cierto que los que pitamos nos hemos perdido parte de esa vida en la que se pueden desarrollar las capacidades para relacionarse con el otro sexo. Sin embargo, sospecho que el área de las relaciones afectivas es siempre un enigma, cualquiera que haya sido tu experiencia anterior. 

Siendo más viejo que tu padre, puedo presumir de haber visto de todo. Sin embargo no puedo presumir de tener una bola de cristal para saber cuál va a ser una decisión correcta en lo relativo a elegir pareja. Muchas veces he visto a parejas salir adelante contra todo pronóstico, lo mismo que he visto fracasar a parejas “perfectas”. Debo aclarar que también he visto parejas “perfectas” funcionar muy bien, igual que he visto parejas imposibles fracasar conforme a todas las previsiones.

He llegado a desarrollar el convencimiento de que lo importante no es el “acierto” para encontrar la pareja ideal. Creo que es mucho más importante encontrar alguien que vaya dispuesto a comprometerse en un incierto proyecto de vida común. En este sentido, la pareja “ideal” sería aquella que sabe que vivir juntos es un constante, perpetuo, interminable, ejercicio de amor. Debería bastar con poner la palabra amor, pero para aclararnos bien la voy a desglosar en algunos de los factores que componen el ejercicio del amor: respeto, diálogo, buen humor, comprensión, generosidad, creatividad, ilusión, paciencia, buen rollo, correspondencia, adaptabilidad y… bueno, creo que ya se entiende por donde voy.

Me parece que esto es mucho más importante si comprendemos que la vida es cambio permanente. Cada uno cambia y por lo tanto la pareja es una relación dinámica, que empieza siendo una cosa y evoluciona para terminar siendo algo completamente diferente. Creo que la gente no acaba de ser consciente plenamente del camino cuando empiezan una relación. Te voy a mencionar solo algunas cosas que hacen la evolución de una pareja sea algo imprevisible: tener hijos, o no, tener hijos con necesidades especiales, vivir cerca de la familia política, fracasar en la carrera, triunfar en la carrera, emigrar, enfermedad grave, enfermedad crónica, una desgracia inesperada, una fortuna inesperada… y muchas más cosas. Cualquiera de estos factores puede lograr que una pareja madure mucho o que se destruya, y eso solo depende de cuál sea su compromiso, su voluntad, para ejercer el amor, según el desglose del párrafo anterior.

A veces una persona elije pareja por motivos que no son estables. Riqueza, belleza, salud, energía, relaciones sociales. Cuando esas cosas cambian, ya pierden el interés en la pareja. Si la riqueza se va, si la belleza se oxida, si la salud se resiente, la energía se desgasta y las relaciones sociales cambian, la unión de la pareja se termina, porque no estaba comprometida a un proyecto incierto y cambiante, sino a una ilusión de estabilidad imposible. Nada puededurar para siempre, excepto la voluntad de estar juntos en cada circunstancia.

Intuyo que una de las cosas que te desconcierta es que no te sientes perdidamente enamorada, que no suspiras de loca pasión como decían los antiguos boleros, que no te tiemblan las piernas cuando sientes su presencia. Bueno, pues no pasa nada. He conocido personas con niveles de enamoramiento cercanos a la enajenación y aquello terminó en nada o incluso peor. Esa intensa emoción, tan bien explotada y sobrevalorada por la literatura y el cine, tiene mucho de autosugestión y de bioquímica. Ayuda poco a tomar decisiones medio sensatas y tiene tendencia a diluirse rápidamente. Sin embargo, es deliciosa.

Dices que no estás segura. Lamento desilusionarte, pero en esta materia no es posible estar seguro de nada. E incluso es preferible no estar seguro de nada porque eso te obliga a esmerarte cada día en el cuidado de tu relación con tu pareja. Tampoco interpretes estas palabras como un consejo para que te quedes con tu chico. No voy por ahí. Voy por la idea de que no busques seguridad en algo que de por sí es incierto. En este terreno no hay fórmulas que sirvan.

Esto me ha salido como una respuesta de Elena Francis. Si no sabes a qué me refiero, pregúntale a tu abuela. ¡Qué vergüenza!

Con todos mis buenos deseos,
Dionisio, el Areopagita.









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