Opus, orfanatos y franquismo.- Ramón
Fecha Wednesday, 29 June 2016
Tema 900. Sin clasificar


Hola,

 

¡Menuda la que ha armado Ana Azanza con su escrito sobre los orfanatos franquistas! La verdad es que la discusión está dando para bastante y removiendo bastantes cosas. Entre ellas, la visión que tenemos de nuestra propia historia.

 

Yo no iba a decir nada más, pero la participación de Curial que me ha llegado al alma...



Me ha sentado bastante mal. Dices que los niños del Auxilio Social tuvieron la "suerte" de no estar en los orfanatos estalinistas, donde las condiciones eran todavía peores. Curial: sabes tan bien como yo que dos males no hacen un bien. Que unos fueran unos monstruos no quita que otros también lo fueran, aunque en otra escala y con otras connotaciones. De verdad, no entiendo cómo puedes decir eso si no es por exculpar a la dictadura. Manda narices. Creo que es un ejemplo más de lo que dice Dionisio: en este país queremos consagrar la impunidad.

 

Por otra parte, creo que eres tú quien no quiere escuchar los argumentos de los académicos que intentan desvelar la verdadera historia del franquismo. Que no todo era vino y rosas, sino también mucha represión. No digo que el franquismo no tuviera éxito en su pedagogía de la desmemoria, del cambio de la historia. Te lo concedo. Pero no te concedo que "aquí no pasaba nada", que "se vivía muy bien con tal de que no te metieras en política" o peor aún, como dices tú mismo, teníamos que darle gracias al Régimen por no estar en Camboya.

 

Repito por si no se entiende: la historia la hacen los vencedores, que se quedan con todo el pastel (que al final, tristemente, es de lo que se trata) y que encima tienen la desvergüenza de mostrarse como los salvadores, los buenos y encima si hicieron algo mal fue porque no les quedó más remedio. 

 

Pongamos un ejemplo lejano: el Imperio Británico. Tan glorioso, tan cosmopolita. Recientemente, se ha desatado una polémica en Australia porque un libro de texto ha dicho que Australia fue "conquistada" o "depredada" por los colonos británicos. Claro, a los británicos les parece "entorpecer la convivencia" o "desenterrar a los muertos" ¿Qué diríamos si fuéramos de tribus australianas, que ni siquiera les dejan su propio nombre y les llaman aborígenes? ¿Quiere alguien recordar que se hacían maletas con la piel de los aborígenes de Tasmania?¿Sabe alguien que en Australia daban a los nativos harina envenenada y mantas de enfermos de tifus? ¿Que los expulsaban de sus tierras a los peores lugares para que se murieran, les quitaban a sus hijos para llevarlos a orfanatos donde morían de pena, de miseria o sufrían abusos? ¿Nadie conoce las barbaridades de los británicos contra los independentistas africanos en los años 50? ¿Las barbaridades contra los africanos durante la colonización? ¿Cómo vamos a admirar ese imperio, sentado en un "Trono de Sangre"?

 

Pues eso mismo sucede con la relación Opus / Franquismo. El Opus apoyó lo que era el franquismo. En España todo el mundo sabía lo de los fusilamientos, las depuraciones de funcionarios, las expropiaciones de bienes, la cárcel... Evidentemente, no sabemos si había gente del Opus en el Auxilio Social, ni creo que nos dejen saberlo. Lo importante de este debate es que veamos que los apoyos que damos no son neutrales. Que podemos estar apoyando un sistema injusto y de terror.

 

Y no me vale el manido argumento de la persecución durante la república, etc etc... porque se suponía que el franquismo (y con él la Iglesia, que para eso era un régimen confesional) iban a traer justicia y paz. Nada más lejos. Si tan evangélicos eran, no se entiende cómo no pusieron la otra mejilla, oraron por los enemigos, etc. No señor, se lanzaron a reprimir el país durante cuarenta años, mientras se lo repartían como sátrapas que eran.

 

No podemos ni debemos quedarnos con la historia escrita por los vencedores, sean los que sean. En el caso del Opus, claramente la historia oficial es la del Opus. Opuslibros es un ejemplo de que no nos debemos conformar, que hay bastantes más relatos que el pastiche oficial. Por lo menos nosotros que decimos que nuestro Dios es un carpintero crucificado por el poder político y religioso de su época, por decir que el Reino tenía que ser otra cosa.

 

Y por terminar, hago mía la pregunta de Ana Azanza ¿Cuánto de ese Opus Dei que estaba tan cómodo con Franco queda incrustado en el poder español actual, a través de sus contactos económicos y personales? Allá cada uno con su conciencia.

 

Que Dios os guarde

 

Ramón







Este artículo proviene de Opuslibros
http://www.opuslibros.org/nuevaweb

La dirección de esta noticia es:
http://www.opuslibros.org/nuevaweb/modules.php?name=News&file=article&sid=24016