¡Pero mi querida "Unanume"!
Que mientras me tenías en vilo, tú conociste la libertad y el amor. La vida real. ¡Bienvenida al club!
No sabes cuánto me alegro, y seguro nos alegramos todos de que haya pasado la pesadilla y seas feliz.
¡Cuéntanos algo de vez en cuando!
Gracias, y un cariñoso abrazo
Fueraborda