Sobre los años de la adolescencia.- Opacan
Fecha Friday, 07 April 2006
Tema 030. Adolescentes y jóvenes


Yo no pité a los 14,5, sino a los 15,4; para el caso poco más da; en estatura era como ahora, 22 años después, (uff, como suena, si aún soy muy joven, o al menos me siento muy joven), en aspecto, algo más delgada, pero los rasgos faciales similares a los actuales, aún me reconocen personas que no me han visto desde los 8 o 10 años, ...

Sin embargo, aunque sustancialmente el carácter sea el mismo, lo siento pero no es igual; la vida te va aportando un algo  llamado "experiencia", que te enseña a responder de diversas formas ante unas determinadas situaciones,  te aporta madurez, seguridad y una autoestima más ajustada, en el caso de que todo transcurra normalmente. Con 15 años; a no ser que uno haya vivido una infancia traumática y dura, llena de dificultades; no se tiene madurez para decidir sobre cuestiones tan serias. Además, el patrón de chicos que capta la Obra, de familia estable y unida, con medios económicos aceptables, sin culebrones ni historias truculentas en su genealogía inmediata,... me hace muy dificil concebir que cualquiera de los muchacho/as que pita a esta edad tenga precisamente una experiencia que le haga maduro antes de tiempo.

Me dedico a la enseñanza, llevo más de cuatro trienios ejerciendo, han pasado por mis manos muchas promociones de chicos y chicas y, no sé si para bien o para mal, se nota que cada vez son más inmaduros en general; aunque la  movida comienza a menos edad los chavales no saben lo que quieren  ni a los catorce ni a los diecisiete ni a los ..., en la mayoría de los casos. Viven en su mundo de comodidades, ordenador, videoconsolas, todo por delante sin el menor esfuerzo y con cada vez más facilidad, escasez de responsabilidades, el sí por delante a todo lo que piden,...  Esto lo digo por los más jovenes, por el presente, por los que están cerca y dudan.

Yo me creía muy mayor a los quince, a los diecisiete, ..., no tenía una vida excesivamente cómoda, si tenía responsabilidades y era una cría que se dejó engatusar por los efectos de un curso de retiro.  Quise dar marcha atrás, pero no tenía madurez y valor para ello, a eso no se te anima nunca y por no ser madura con diecisiete, me echaron con 20, porque acabé enferma de no ver a mis padres, de hablar poco con ellos y de no escribirles con libertad, (sabía lo de las cartas abiertas), acabé enferma de nostalgia, de desarraigo, de pena..., y yo no me daba cuenta, era tan ingenúa que me creí lo de "depresión endógena", fuí tan ingenúa que  me creí lo que me contaron para que me marchara; aparte estaba atontada, dormida, drogada todo el día. Pensaréis, ¿Debilidad de carácter?, yo creo que no, creo que inmadurez, no soy débil de carácter, quizás estuve cegada mucho tiempo, pero ya pasó y con 38 años, y algo de experiencia, las cosas se ven de forma diferente, aunque algo de dolor, por sentirte engañada y manipulada queda. Animo a los recién salidos que son muy  jóvenes aún, porque se crece día a día y el tiempo va poniendo las cosas en su lugar. Ánimo a los más mayores, la vida es hermosa y nunca sabemos que bondades nos reserva Dios, después de este tiempo que para muchos ha sido un calvario.

No es lo mismo 15 que 25 o 35, lo siento, pero no es lo mismo.

Opacan









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