La famosa frase 'si no puedes alabar, calla'.- Otaluto
Fecha Thursday, 19 February 2004
Tema 070. Costumbres y Praxis


Un parrafo de la ultima carta del inefable Josecar me ha traido a la mente un tema que para mi es importante. Dice: "ya no sé cómo mostrar humanidad, porque o "doy demasiados abrazos", o me sale "pánfilo y melifluo", o intento decir algo puramente positivo sin decir nada malo de nadie y se tergiversa".

El tema que quiero tratar está expresado en la famosa frase "si no puedes alabar, calla". Detrás de esta pequeña frase se esconde todo un programa para el control de la conciencia. En la obra se callan las cosas, nunca se discuten a plena luz. Existe una prohibición estricta de hablar acerca de los directores y sus acciones de modo negativo. Ahora bien, como el responsable de todo lo que existe en la obra es el padre, que actua a través de los directores, la prohibición se extiende implicitamente hacia casi todo. Pronto uno aprende que criticar cualquier cosa, aunque sea el color de una habitacion, puede ser peligroso. "Es que el color lo eligió D. Mernabo, que comenzó la labor en la región y era uno de los primeros..." Y de este modo un comentario dicho inocentemente, se convierte en una muestra de "mal espiritu", materia de corrección fraterna. Por ejemplo, a mi me tocó vivir en un centro horrible, una casa antigua y sin luz, pero claro, allí habia estado durmiendo "nuestro padre" una semana, con lo cual la casa y todas sus pertenencias estaban bendecidas y a aguantarse.

Pero el "si no puedes alabar, calla" va mucho más allá.

En la obra, lo único que realmente vale alabar en la gente es su predisposición a aceptar el mensaje del opus dei, con lo que queda excluída de la conversación toda referencia a aquellos que no son "amigos" o no "van por la labor". En la obra se habla poco de la gente, de la familia o de lo que uno hace en el trabajo (se excluyen obras corporativas), y como solo se puede hablar en términos positivos lo que se dice es la mitad de la verdad, anodino y carente de significado. Se pierde la sal y la picardia del diálogo y se cae en la repetición de formulas comunes y "seguras". Recuerdo que una vez, ya con varios años fuera, me invitó a almorzar un director de alto cargo con el que mantenía algun contacto. Yo estaba poco dispuesto a "hacer la charla", por cortesía no tocabamos el tema de la obra, y cada vez que el diálogo se animaba recordando cosas de la gente, llegaba un punto en que se mencionaba algun detalle no del todo positivo, y este buen amigo cambiaba de tema. El resultado fue un desastre, nada para hablar, salvo del tiempo y la situación del país.

El problema de Josecarlos, del que parece no darse cuenta aunque le pase un tren por encima, es justamente ese, solo dice cosas "puramente positivas". Y la vida tiene lo bueno y lo malo, tambien el opus dei y tambien cada uno de nosotros. Y un discurso sin claroscuro, donde no se muestran los defectos de lo que se habla, ni se trasparentan los defectos del que habla, repele. Es inhumano, porque simplemente no es humano, pese a que adopte formas educadas y melifluas. Nadie tergiversa, no solo es importante lo que se dice, sino lo que queda sin decir. Ojalá este tema lo desarrolle alguien como E.B.E. o algun otro pensador profundo de la red, yo lo he dicho como me salía.

Paz a todos.

Otaluto.









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