Gracias a Dios, ¡nos fuimos!
Opus Dei: ¿un CAMINO a ninguna parte?

Correspondencia
Inicio
Quiénes somos
Correspondencia
Libros silenciados
Documentos internos del Opus Dei
Tus escritos
Recursos para seguir adelante
La trampa de la vocación
Recortes de prensa
Sobre esta web (FAQs)
Contacta con nosotros si...
Homenaje
Links

Google

en opuslibros

CORRESPONDENCIA

 

Miércoles, 18 de Noviembre de 2009



Justicia para unos padres.- Daniel_M.

Apreciado Miguel_M:

He leído tu carta del viernes pasado. Deseo que recuperes a tu hijo y que se resuelva el grave asunto que nos has contado. Te planteo una serie de observaciones e ideas sobre lo que has escrito:

1.     Tu hijo tiene 20 años. Por tanto, es mayor de edad. Si acudieras a la jurisdicción civil, te dirían que no tienes “derecho” a reclamar nada, porque él es libre para tomar sus decisiones. Es adulto. Puede, si quiere, no mantener ninguna relación con vosotros. Esto choca con los sentimientos normales que debería tener un hijo, pero, legalmente no se le puede exigir nada.

Pienso que si acudes a la Iglesia, tendrás cierto obstáculo por el hecho de su mayoría de edad. Como adulto que es, puede perfectamente ingresar en una orden religiosa, instituto secular y prelatura personal si así lo desea. Sé que pitó con 15 años, y en un mes; pero él, ahora, es adulto y se mantiene en su decisión de ser numerario del Opus Dei...



(Leer artículo completo...)




Algunos interrogantes que me hago respecto al opus dei.- Boli

Llevo algun tiempo leyendo vuestra página y aunque soy supernumerari@, tengo que deciros que gracias a Dios lo seré por poco tiempo, de hecho así se lo he manisfestado ya.

No sé por donde empezar. Después de mi experiencia que contaré al menos en parte, porque hay otra que aun no estoy preparad@ para hacerlo y en la que hay un sufrimiento inmenso prolongado durante 15 años. En su momento, puede que comparta con vosotros todo.

Lo cierto es que hay muchas personas de la obra o de otras instituciones que puedan pensar que esta web se caracteriza por un odio a la obra e incluso a la Iglesia, habrá de todo, pero, desde luego no es mi caso y con respecto a otras personas que intervienen en la misma, es la única forma de expresar lo que han sufrido, y al compartir ese sufrimiento en parte este se reduce, es como una especie de sanación espiritual, nos sirve de desahogo.

En todo caso, el opus dei debería preguntarse por un momento. ¿por qué se produce  sufrimiento, tanto en personas que permanecen dentro como en personas que se han ido o estamos camino de?. Al Opus dei no lo estamos matando las personas que según ellos no somos fieles, lo están matando ellos mismos, con esto no quiero generalizar, porque sería injusto ya que, todavía quedan en la institución gente buena, justa y  con verdadera vocación de entrega. Me pregunto, cual es el motivo oculto al menos para "LA CLASE DE LA TROPA". ¿Por qué el prelado se empeña en abrir centros a diestro y siniestro, dandoselas de emprendedor y de que la obra se expande como la espuma  y sin embargo no atiende y cuida los que ya estan abiertos y más proximos a él?. San José Maria, que por cierto, aqui entre nosotros, ni es ni será nunca un santo de mi devoción (ya antes de empezar a leeros), no se si os pasaba a vosotros, pero debo ser muy cort@ por que nunca entendi el mensaje de sus peliculas, yo pensaba, caramba que pocas luces tengo, que creo que las respuestas que da además de no ser espontaneas como se nos hacia creer, pienso que un niño de 7 años lo haría mejor, sin toda la parafernalia que le rodeaba. Perdonad el parentesis, es que se me agolpan las ideas, procuraré centrarme.

Decia que S. José Maria,decia:  Cuando haya entre vosotros indiferencia, habreis matado al opus dei; de momento no hay indiferencia al menos hacia los temas economicos, porque dejas de serle util y empiezas a ser un estorbo cuando tu cuenta corriente disminuye en varios ceros. Otra pregunta que lanzo al aire ¿Por qué el opus dei defiende bajo la falsa apariencia de que todos los matrimonios se llevan bien, y si no es lo mismo, se llevan bien, el tema de los malos tratos?. Os puedo decir que estan a la orden del dia, y sin embargo miran hacia otro lado, y si se les pide ayuda o consejo, te tratan por loc@. Os puedo asegurar que hay muchisimo sufrimiento con este tema y también os puedo decir que incluso llegan a declarar en contra de la persona maltratada y a favor del que maltrata, a cambio de unos cuantos favores. Es horrible, conozco de primera persona esta situación y conozco también intimamente a otras personas que han pasado por la misma.

María no dudo ni un instante de tu buena fe, de hecho, ya dije antes que hay personas maravillosas y que te ayudan, a crecer tanto desde el punto de vista humano como espiritual. Yo me refiero a aquellas que generalmente estan en labores de gobierno y que son las que realmente le hacen daño al opus dei, y en definitiva lo están matando y el prelado tiene toda la culpa, por no prescindir de ellas. ¿No sería mejor que hubiese menos gente en la obra, pero los que esten sea realmente por entrega a Dios y al projimo, y no por cumplir con unas estadisticas?. Por último pensad que la iglesia católica no es solo el opus dei.

Muchos saludos para todos.
Boli

P.D. de momento no quiero decir si soy una mujer o un hombre, porque estoy sufriendo todo el proceso y no me siento con fuerzas.





Mi foto para Quiénes somos.- Alfonso Islas

Hola,
 
Quisiera incluir mi fotografia y nombre en la secciòn de Quienes somos.
 

 
Carlos Alfonso Islas Rosales
Ex numerario en la ciudad de Monterrey, NL, México entre los años 1992 y 1999.
 
Tengo alrededor de 3 años leyendo periodicamente los artìculos y he estado en contacto con algunos de los que escriben en la pagina por el chat. Gracias por regresarme a la realidad. Todavía no supero el haber desperdiciado 7 años de mi vida en esta secta/institución diabólica o lo que sea...
 
La foto en el bautizo de mi hija. Aunque he perdido la fe, si Dios existiera, no habria Opus Dei.
 
Saludos

Alfonso Islas




De Hugo Cáceres y su cardenal.- Zartan

Estimado Hugo Cáceres, no quiero poner en duda la buena voluntad de tu escrito pero -en mi opinión- cuando alguien mete demasiadas cosas en un guiso, corre el riesgo a que el sabor final lo haga intragable aunque todos sus componentes -por separado- sean pasables, buenos o buenísimos.

Una cosa es que la mayor parte de los que por esta página andamos, seamos ex con un mas o menos cabreito-enfado-dolor-resentimiento (o como quieras llamarlo) con la obra y otra -bien distinta- es que eso nos ciegue totalmente o hayamos perdido el concepto de la verdad y demos por bueno y cierto todo … por el solo hecho de que alguien arremeta contra algún IN.

Acepto completamente que tu cardenal sea mal hablado (si lo has visto jugar baloncesto debes admitir como seguro ese punto) y otra serie de afirmaciones te las podría dar por buenas visto que nunca he estado en Lima y no tengo como comprobarlas o rebatirlas, pero cuando lo pintas como poco inteligente o medio ignorante … ya la cosa empieza a hacerseme cuesta arriba y -al final, como traca gorda- lo pones como adulador de Fujimori y “obcecado enemigo de la defensa de los derechos humanos” casi casi un Hitler peruano. Estimado, el cargar las tintas hace que todo suene increible. Vamos, que al leer tu escrito tengo la leve sensación de que alguien nos quiere utilizar, me quiere utilizar y -la verdad- ya no estoy para eso.

La gente cambia con el tiempo, eso es verdad, pero hay cosas que siguen inmutables con el paso de los años. Si alguien te hiciese un retrato mío y te contara que, por mi afición al futbol, soy un desordenado del patín, capaz de dejar de trabajar, de maltratar a todo partidario de otro equipo y que cuando señalan un penalty al mio soy capaz de decir las burradas mas gordas … posiblemente tu lo darías por bueno, pero alguien que me conozca mínimamente te diría que esas afirmaciones no son creibles (aunque sea cierto que soy un desordenado visceral y malhablado) pues a mi el futbol me importa un benemérito rábano. Pues algo así me ha pasado con tu envío: simplemente no me cuadra.

Te agradecería que nos contases la firme: cual es la postura bíblica del padre Eduardo Arens que saca de quicio a tu cardenal y en eso, posiblemente, encontrarías mi apoyo ante la intolerancia del card. Cipriani, o no ... si su afirmación es que Golda Meir es la madre de Moisés. Pero -por favor- no mezcles temas.

Por si te viniese la duda quiero aclararte que no creo que Juan Luis lea esto, que si lo leyese no sabría quien soy y que si lo supiese ni me recordaría, pues entro en la categoría de los “cancelados de la memoria”, en definitiva que no espero nada de él ni de la gente de su equipo, es un simple aporte en búsqueda de la verdad para los que no lo conocen.

Espero que no te enfades conmigo y que tengas paciencia como yo la he tenido con Calandria.

Zartan





María y el botafumeiro.- Kaiser

Vaya.

Brotan historias de una claridad meridiana, como de cristal, pero de un cristal erizado. Como la historia de Miguel y su hijo, cuyos trazos paralelos con lo que yo viví se separan justo cuando éste cambia de ciudad, dejándome una sensación espeluznante de encontrarme ante un reflejo preterido de en qué pude convertirme.

Alumbra la web maniobras torticeras en la designación de responsables de centros y labores, dando nombres, fechas y lugares como golpes de badajo sobre la tozudez de la oscura mole. Cada golpe, cada frase, empuja al mundo a la comprensión del objeto.

Cae el cincel sobre el amasijo velado y descubre el magma en el que se funde tanta angustia, tanta locura.

Y es cuando llega María con el botafumeiro y deja la atmósfera espesa de vaciedades. María es joven y feliz. Y se esfuerza por hacerlo todo bien. No por ella. Por Dios. No por ella.  

-¿Y la familia?

- Bien. Me esfuerzo.

-¿Qué es bien?

Bueno, ha dicho que se esfuerza, o sea, que fácil tampoco lo tiene. Pero es feliz. Porque se esfuerza. Pero, si no tuviera que esforzarse, si no estuviera forzada, podría hacer directamente el bien. todo el bien, no sólo a su familia, a su verdadera familia, sino a sus amigos, sus verdaderos amigos, sin necesidad de irlo contando. Porque -esa es otra-, ¿qué amigos tiene una numeraria? ¡Cuidado con los amigos!

-Me esfuerzo. Soy feliz.

-¡Hija, si con los amigos no hay que forzar nada!

- Pero yo me esfuerzo. Soy feliz.

- María, la gente sufre, cae a tu alrededor. Les sedan.   

-No lo veo. Soy feliz. Me esfuerzo. 

-Pero hablas de "desastres". Admites que algo pasa. En ese contexto, me parece obsceno este despliegue tuyo de felicidad plastificada para acallar lo que verdaderqamente debe conocerse. Del mismo modo, lo que dices no ver a tu alrededor te lo tapa el humo del botafumeiro. Tú misma admites que no querrías conocer historias "por el estilo". Chica, no son simples historias.  Yo sé que no lo dices en tono peyorativo. Es que ya no eres más que restos de un ser humano disolviéndose dentro de ti.

-Me esfuerzo.

Pues que seas feliz.

Kaiser  





Las mentiras.- Otaluto

A raíz de escritos de Trinity, surge el tema de la mentira en el opus dei.

En este sentido nada debe sorprendernos, en la obra se miente siempre. Y con total descaro, es como una segunda naturaleza.

 

La raíz de esta actitud es la convicción de que el hombre corriente, aun cuando sea cristiano, no puede comprender las cosas de la obra.  Por lo tanto es lícito dar cualquier explicación de los hechos que haga quedar bien a la obra. Así es como las medias verdades, los cuartos de verdades, o si las circunstancias lo requieren, la mentira lisa y llana está del todo permitida.

 

Cuento una anécdota ínfima pero que lo ejemplifica muy bien. Los otros días asistí al funeral de la madre de un sacerdote numerario. Obviamente, y como corresponde, estaba toda la plana mayor, incluido el Consiliario.

 

Al comienzo de la misa, el Consiliario dio unas explicaciones de por qué iba  a presidir él mismo la Misa. Según él, hubiera correspondido que presidiera el hijo de la difunta, pero todos los presentes podían imaginar que las duras circunstancias por las que estaba atravesando lo impedían.

 

La verdad es que se trataba de un fallecimiento anunciado, luego de una larga enfermedad. Y el sacerdote en cuestión, más allá del lógico dolor, no parecía particularmente quebrado, sino más bien sereno.

 

Pero todos sabemos que estando el Consiliario presente sería inaudito que presidiera otro sacerdote. Nadie  que conozca la obra se imagina al Consiliario concelebrando como segundón junto al resto de los sacerdotes.

 

Esto yo no lo juzgo, me da igual, que hagan lo que les de la gana. Pero la pregunta es: para qué dar explicaciones que no fueron solicitadas. Y puestos a explicar, por qué es tan necesario decir algo que no es cierto? No es más fácil decir la verdad?

 

Paz a todos.

Otaluto.





CAMINO (Puntos 55 al 58).- Floresyflorecillas

LO QUE DEBERÍA DECIR EL LIBRO DE CAMINO:


PUNTO 55

EL TEMPLO DE DIOS. LA INTEMPERANCIA. LA CARIDAD.


“Sed Astutos cómo serpientes, y Sencillos cómo Palomas”. La fuerza de la Autenticidad, te hará darte cuenta de que nó por vivir La Caridad, tienes porqué considerarte blandurrón, y nó por ser Astuto e Inteligente, estás faltando a La Caridad. Esto, evidentemente te lo dará Dios, pues el hombre por sus propias fuerzas nó es capaz de realizarlo, pero si miras el Evangelio, verás que Jesucristo nó era blandurrón, pero tampoco era “Intemperante”. Quizás Le viste agresivo cuando lanzó a latigazos a los mercaderes del Templo. Piensa qué harías tú en Su lugar. Te indignarías contra todos los que ofendían a Tu Padre, porque ocupaban un lugar que no les pertenecía. Pero observa también que el Evangelio, dice que “atando una cuerda a modo de látigo (no era pues un látigo de verdad), echó a todos los mercaderes (no les golpeó), volcando las mesas (no azotando a nadie ni hiriendo a nadie), y derramando todas sus mercancías”. En ningún momento se ve la violencia del Señor, porque no la hubo. Él, hecho a la gente, hiriendo lo que más apreciaban allí ellos: sus mercancías, pero no maltrató más que a su pecado, que era estar profanando el Templo con sus mercancías y lo que hacían con ellas, venderlas...

(Leer artículo completo...)



 

Correos Anteriores

Ir a la correspondencia del día

Ir a la página principal

 

Gracias a Dios, ¡nos fuimos!
Opus Dei: ¿un CAMINO a ninguna parte?