Gracias a Dios, ¡nos fuimos!
Opus Dei: ¿un CAMINO a ninguna parte?

Correspondencia
Inicio
Quiénes somos
Correspondencia
Libros silenciados
Documentos internos del Opus Dei
Tus escritos
Recursos para seguir adelante
La trampa de la vocación
Recortes de prensa
Sobre esta web (FAQs)
Contacta con nosotros si...
Homenaje
Links
Si quieres ayudar económicamente...

Google

en opuslibros

Si quieres ayudar económicamente al sostenimiento de Opuslibros puedes hacerlo desde aquí.


CORRESPONDENCIA

 

Viernes, 01 de Mayo de 2015



Pobreza institucional y personal.- Gervasio

Pobreza institucional y personal

Autor: Gervasio, 1/05/2015

La pobreza institucional del Opus Dei queda reflejada en las viviendas de los numerarios, así como en sus casas de retiro, llamadas antiguamente casas de ejercicios espirituales. Estas últimas no son viviendas. En ellas se llevan a cabo, además de ejercicios espirituales, otras actividades de corta duración, de un mes a lo sumo. No están destinadas solamente a numerarios, sino a toda clase de personas —hombres y mujeres, siempre por separado—, dependiendo del tipo de actividad programada. Los supernumerarios y agregados —a diferencia de los numerarios— escogen y organizan a su gusto su propia vivienda. No se la asigna ni organiza el Opus Dei.

En muchos de los pisos para numerarios en que viví, una sirvienta primorosamente uniformada se encargaba de abrir la puerta cuando alguien llamaba al timbre...



(Leer artículo completo...)




Controlando la libertad.- Nicanor

Recuerdo un amigo ex numerario que, al momento de tomar una ducha por las mañanas, movía la perilla del agua caliente y sólo obtenía agua bien fría. Cuando se lo comentó al Director, le respondió que se debía a la mortificación por las intenciones del Padre que todos deben hacer “¡Pero la mortificación es algo voluntario!, ¡Y se puede conmutar por otra!, ¿Dónde está la libertad si no hay posibilidad de tener agua caliente de verdad?”

 

En fin. El caso es que – al parecer – en algunas ciudades han bloqueado el acceso a OpusLibros no mediante un software de control instalado en los ordenadores sino como parte del contrato con el distribuidor de servicios de internet local. Un miedo incontrolable que raya en la paranoia.

 

Nicanor Wong

nicanor.wong@outlook.com





Semblantes tristes… No tienen remedio.- Fueraborda

Disfrutaba ayer de una bonita mañana de sábado estrenando la primavera madrileña por una animada calle comercial.

Al igual que yo, la gente se arremolinaba en las terracitas y en las tiendas de moda.

En contraste con este explosivo ambiente alegre, advertí una figura de mujer vestida de un invernal marrón que apretaba contra sí un abultado sobre tamaño folio y color marrón.

Su mirada, clavada en el suelo parecía querer abrirse camino entre la multitud alborotada, sin mezclarse con ella. La descubrí pronto: era M.E.

Conviví con M.E. en una señorial casa en el mismo barrio chic en el que nos encontramos.

Me llevaba unos años, un tanto taciturna, y siempre descontenta. Confiaba en mí, y cuando yo le daba pié se me habría en amplia confidencia y como a borbotones salían de su boca palabras incontroladas que manifestaban su penoso estado de ánimo, su triste sentimiento de frustración, y el enorme deseo de acercarse a su familia de sangre y dejarse querer por ellos.

Corrí a su encuentro y la envolví en un amplio abrazo. Levanté su cabeza hacia mí, y con mis manos forcé que me mirara, pero rehusó encontrarse con la mía volviendo al juego de sus baldosas como si de un robot se tratara. “Disculpa, pero mi salud no es buena” Con esta frase, pretendía ahorrarse un molesto encuentro con quien ahora era una extraña. A pesar de ello, quise comunicarle mi alegría por estar felizmente casada con un maravilloso hombre.

Pero M.E. tenía prisa. No podía detenerse o llegaría tarde a la Santa Misa.

Y se alejó huyendo, y dejando su estela marrón marcada con sus zapatones de cordones también marrones, y sus sobres marrones, y su olor marrón, y sus pensamientos marrones…

Lo siento, M.E. No tiene remedio tu color marrón.

Y muy pensativa, volví al grupo de amistades que me esperaban. Con sonrisas color carmín, con sombreros y bolsas como globos de colores. Y yo iba sin reloj.

Bufff!

Fueraborda





Preguntas sobre los suicidios.- Ramón

Hola amigos,

Como si fuera una maligna conjunción astral, durante la Semana Santa se sumaron las noticias del suicidio de un piloto de avión, y con él todo el pasaje, con las del suicidio del padre Danilo. A ambos los acogerá el Padre en su sufrimiento, por doloroso que sea en ambos casos, aun por motivos diferentes. El 10 de abril 2015 Carmen Charo nos aportó una lista con personas suicidadas o muertas en circunstancias parecidas en el Opus Dei...



(Leer artículo completo...)




Profundamente escandalizado.- La otra orilla

Hace unos días, preparando un trabajo sobre peregrinaciones a Tierra Santa entré a la web a buscar información y para mi sorpresa me encontré nada menos que con senda página web de Saxum Conference Center  y me quedé asustado, sorprendido y sobre todo escandalizado por la magnitud del proyecto y pensé lo siguiente: el fundador decía que cuando presentaron la obra en Roma les dijeron que llegaba con 100 años de anticipación. Al ver este proyecto pensé: ahora llegan con dos mil años de retraso con estos edificios tan lujosos y ostentosos, cuando la Iglesia ahora nos habla de pobreza auténtica y verdadero servicio a los necesitados. Cuando en realidad en Tierra Santa hay gente que lleva siglos trabajando, los franciscanos por lo menos llevan 8 siglos, y ahora llegan los del opus diciendo que acaban de descubrir el “hilo negro”. También hay que decir que no se podían quedar atrás después del proyecto de Magdala Center, construido por “los de ahora” como les llamaba el Beato Alvaro a los Legionarios de Cristo distinguiéndolos de “los de siempre”, los jesuitas.. Otro proyecto ambicioso y carísimo también...



(Leer artículo completo...)



 

Correos Anteriores

Ir a la correspondencia del día

Ir a la página principal

 

Gracias a Dios, ¡nos fuimos!
Opus Dei: ¿un CAMINO a ninguna parte?