Gracias a Dios, ¡nos fuimos!
Opus Dei: ¿un CAMINO a ninguna parte?

Correspondencia
Inicio
Quiénes somos
Correspondencia
Libros silenciados
Documentos internos del Opus Dei
Tus escritos
Recursos para seguir adelante
La trampa de la vocación
Recortes de prensa
Sobre esta web (FAQs)
Contacta con nosotros si...
Homenaje
Links
Si quieres ayudar económicamente...

Google

en opuslibros

Si quieres ayudar económicamente al sostenimiento de Opuslibros puedes hacerlo desde aquí.


CORRESPONDENCIA

 

Viernes, 02 de Diciembre de 2016



Tiene buen lejos.- Zartán

Eso es lo que un amigo mio, navarrico él y que nunca ha pertenecido a nada, me decía hace poco que es lo que le pasa a la Obra, que “tiene un buen lejos”.

Vamos a ver ¿me quieres explicar que quieres decir con eso?.

“Que la Obra, como las rubias, tiene un buen lejos. Cuando vas por la calle y, a lo lejos, ves una rubia lo primero que haces es calificarla de buena moza tipo Jennifer Aniston o Nicole Kidman. Luego te vas acercando y te das cuenta de que está un poco pasada en kilos, unos treinta o cuarenta, por lo que de “buena” ya la cosa es opinable. Sigues acercándote y te das cuenta que “moza” pues que tampoco, que eso era hace cuarenta años o más. Total que ya cuando estás por adelantarla te das cuenta de que -además- es rubia oxigenada.”

Me reí un buen rato pero después (soy tardo en mis reflexiones) pensé que, como me dicen algunos in, las cosas han cambiado mucho dentro aunque por fuera todo sigue igual de bien: una estructura compacta, sin estridencias, sigue extendiéndose en países nuevos, todos los años se ordenan un buen número de sacerdotes, liturgia impecable… el buen lejos.

Recuerdo que cuando rezábamos todos los días aquello de “pro beatissimo Papa nostro Paulo” a nadie se nos ocurría criticar al Papa, podíamos querer un poco más de calor humano en él, podríamos poner verde al Secretario de Estado, podríamos… pero, para nosotros, el Papa era intocable. El Papa era el Papa y punto.

Pero, al parecer, las cosas han cambiado mas de lo que yo suponía y, no hace mucho, cuando salió la “Amoris Laetitia” un insigne nume me hizo un comentario al respecto que me dejó un poco desconcertado. Más o menos venía a decir que con ese documento, el Papa igualaba el matrimonio religioso al amancebamiento y que todos podrían comulgar sin ningún tipo de restricción y que, como buenos hijos, teníamos que tapar las miserias de nuestro padre el Papa con el manto de la piedad.

Lógicamente me leí la Amoris Laetitia de inicio a fin buscando eso y, la verdad, no lo encontré por ningún lado, solo que hay que acoger, comprender y ayudar. Lo positivo: que me leí la exhortación apostólica de cabo a rabo cosa que (pido por ello perdón y penitencia) no hubiera hecho sin el comentario del nume.

Y, el otro día, más o menos la misma idea pero con el tema de la confesión a personas que han procurado un aborto. Esta vez por parte de un super pero con la misma manta misericordiosa.

Es decir que de lejos bien, pero de cerca la cosa se parece cada vez más a una gorda y falsa rubia. Que quede claro que yo también pienso que un aborto es matar a un ser humano en el lugar donde más seguro debería sentirse, dentro de su propia madre, pero entiendo y comparto perfectamente el acto de misericordia del Papa al facilitar el perdón cuando hay arrepentimiento.

Alguien en esta misma página decía que si estás de guardia y recibes un primer disparo puedes pensar que al centinela borracho de la otra parte se le ha escapado un tiro, si recibes un segundo puedes seguir pensando lo mismo pero, si recibes un tercero, no puedes seguir siendo gilipuertas y tienes que dar la alarma porque te están atacando. Espero un tercer disparo antes de juzgar pero ya con estos dos … como que estoy un poco mosquedado.

No se porqué pero me acuerdo de los cátaros, los puros y -sobre todo- de Novaciano. Imagino que andareis a ver en Google quien era este Novaciano, no sé qué dice pero a mí se me quedó la idea (historia de la Iglesia explicada por don José Luis Pastor en Tor d''Aveia) que era un personaje que se creía superior, puro, y no admitía el perdón de los lapsi (que deberían ser como hoy los extracomunitarios traficantes de droga) pero que la misericordia de la Iglesia no le debe faltar nunca a nadie. Creo que eran cosas suyas (del arquiatra) o de otra época o que el pueblo de la Prelatura se está desmandando un poco. Y si es esto segundo, lo que escribo será de ayuda a dos amigos mios: Fernando y Mariano.

Y que conste que no tengo nada contra las rubias.

Zartán





No apagues el radar. Para Rufo.- CuG

Lo último que intentaría es que pierdas la confianza hacia quien te está ayudando a conocer a Jesús. No conozco tu historia ni tu madurez emocional. Obviamente no eres un niño, pero aprender a conocer a las personas lleva tiempo, y a conocer las instituciones, ¡no te digo!

Las respuestas a tus preguntas:

1) Rufo, no he perdido la fe. Mi salida de la Obra -yo era numerario- se debió a una situación de asfixia espiritual, pero eso no fue culpa del cristianismo. Ahora estoy más sano en mi relación con Cristo (y eso lo mido no por las normas que haga o deje de hacer, sino por el ensanchamiento del corazón que se produjo al dejar de ver en los demás "planes apostólicos concretos", al tener una piedad más auténtica y en otras muchas cosas, que no es del caso comentar aquí).

Podrás leer testimonios en esta web de que algunos han perdido la fe, pero también hay otros que han podido por fin ordenarse sacerdotes -pues en la Obra se lo negaban- así que ¡hay aquí de todo!

Mi percepción es que la mayoría de los "ex" conservamos la fe, pero eso no implica ningún juicio de valor: no todos hemos sido heridos de la misma manera.

2) La segunda cuestión es la que me alarma un poco. Textualmente preguntas: "¿creéis que todos los del Opus Dei son tan malos?". Con todo cariño, es una formulación muy ingenua, Rufo. ¿"Todos"? ¿"Tan"? En ninguno de los miles de artículos de esta web leerás que "Todos los del Opus Dei son tan malos." Nadie dice eso.

¿Y entonces?

Mira, estuve dentro varias décadas y te puedo decir que si bien yo no era "malo", hice cosas que objetivamente estaban mal, y no estoy hablando aquí de pecados corrientes, de los que aparecen en los exámenes de conciencia tradicionales, sino de un "modus operandi" que aprendí en el Opus Dei para vincularme con los que "no eran de la Obra pero podían serlo", con los que "ya no eran o no interesaban" y con "los que estaban dentro". Aquí es donde el asunto no marcha.

Puedes leer a qué cosas me refiero en mi escrito "Pidiendo perdón". Este "modus operandi" no ha cambiado. Lo han maquillado un poco, pero sigue igual.

Así, pues, amigo Rufo, ¡que Dios te guíe en tu búsqueda pero que no permita que te manipulen!

CuG





Para Rufo.- Orange

Querido Rufo: Yo también estuve en la Universidad de Navarra unos cuantos años y conozco bien el percal.

Con respecto a tu pregunta de si todos los que aquí escribimos hemos perdido la Fe, yo creo que no, pero yo te puedo hablar solo por mí. Yo ahora tengo una Fe mucho más sólida, acendrada y adulta que cuando estaba en el Opus Dei.

Sobre si creo que todos los del Opus Dei son tan malos te respondo que el decidir si alguien es bueno o malo no me corresponde juzgarlo a mí ni a ti ni a nadie pues solo Dios puede juzgar las conciencias. Lo que si te digo es que, sin entrar en juicios morales de intenciones, dada la praxis de proselitismo coactivo que practica el Opus Dei, ten por seguro que si tú te pones "a tiro" de ellos, te van a aplicar el mismo método de captación que siempre emplean:  te van a engatusar aparentando que son amigos tuyos para ganarse tu confianza y poder así meter en tu cabeza la estrecha y excluyente visión que tienen de la Religión. Una vez que tú aceptes y practiques eso , estudiarán a tus espaldas comentando entre ellos con pelos y señales lo que les hayas contado de tu vida para decidir si te proponen o no ser del Opus Dei , según ellos vean si puedes serles útil o no.

En el caso de que te lo propongan aumentarán las coacciones. Si tú dices que sí, entrarás en una secta donde comprobarás que tus supuestos amigos no lo son, pues ellos velan por los intereses de la secta en vez de velar por ti. Si tú dices que no, se acabará igualmente la falsa amistad y te abandonarán. Todo esto puedes hablarlo con cualquier persona que haya pasado por el Opus Dei y verás como casi todos coinciden más o menos en lo mismo. Son todas estas vivencias muy fuertes que pueden, en efecto, hacer tambalear la Fe si ésta no está bien arraigada. Así que, ojo.

Recibe un fuerte abrazo. Si deseas comunicarte conmigo, pídele mi mail a la webmaster, Agustina, y estaré encantado de que charlemos.

Orange.





Escritos recomendados.- Agustina

 

La batalla de la conciencia. Pinsapo

"El Opus Dei no se preocupó por nuestro hijo y miró para otro lado".

Obras de misericordia del Opus Dei. Simplicio

Te confieso, y luego me cuentas... Enriqueta

Mentar la soga en casa del ahorcado. La del jersey rojo

Llévalo a la oración... La neurolingüística. Sharon Sharia

¿Quién quiere ser director? RobertLeeJones




 

Correos Anteriores

Ir a la correspondencia del día

Ir a la página principal

 

Gracias a Dios, ¡nos fuimos!
Opus Dei: ¿un CAMINO a ninguna parte?