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CORRESPONDENCIA

 

Miércoles, 06 de Diciembre de 2017



Al respecto de pitajes de supernumerarios y el instinto paternal.- Nicanor

Aunque abunda información en las redes, los hijos e hijas de supernumerarios (as) siguen siendo objeto del agresivo proselitismo de la Obra. Peor aún si los padres que deberían proteger su libertad se ven impelidos a obedecer y ceder lo más preciado que Dios les ha dado para el uso del Opus Dei.

Siempre se me acogota el corazón cuando me entero de que alguno de los hijos o hijas de esas personas que conocí cuando estaba dentro, pitó. No saben, nadie les dirá jamás, las violaciones y vejámenes a la conciencia que sus pequeños que sufrirán una y otra y otra vez. Las lágrimas que derramarán por las noches. La sensación de soledad y ausencia de amor… Sí, les prohibirán les comenten a sus papás de esos sufrimientos, que escondan su dolor y muestren una sonrisa, que les cuenten que todo marcha de maravilla y son muy felices; que todo marcha como “El Padre” lo quiere.

Sólo puedo pedirles a esos papás y mamás que saquen a flote ese instinto de supervivencia, de amor, y estén atentos por la salud física, mental y espiritual de sus hijas e hijos. No podrán tener acceso a los exámenes médicos que se realicen, tampoco tendrán acceso a conversaciones íntimas que antes podían sostener con ellos. Pero una mamá, un papá desarrollan un sexto sentido cuando algo anda mal. Es momento de intervenir y no ceder a la presión que “la madre guapa” – la Obra - se encargará y que develen todo los que la hija o el hijo les haya confiado.

“Cada uno cosecha lo que siembra”. Papás, mamás, ¡No los abandonen!, ¡No los dejen solos! Cuando estén totalmente estropeados, enfermos, agotados y no sirvan para los fines de la Obra, los llamarán para devolvérselos y ustedes se hagan cargo de aquello que entregaron pensando que le hacían una ofrenda a Dios.

Nicanor
nicanor.wong@outlook.com

Lima-Perú





Diferentes pero iguales (III).- Salypimienta

En el escrito anterior me quedé en lo difícil que es para algunos ex miembros expresar palabras de cariño o de afecto. Para otros al contrario, ingenuamente dicen lo que piensan y lo que sienten sin que se les cruce por la cabeza que eso pueda ser malinterpretado y dar pie a cosas que no son.

La manía de justificarnos para todo y en todo.

Cuando alguien nos hace una llamada de atención, nos critica o nos dice lo que piensa sobre nosotros, inmediatamente sentimos la necesidad de justificarnos. Llevamos las críticas MUY MAL. Debe de ser por la cantidad de correcciones fraternas y llamadas de atención que recibimos por montones y casi siempre injustamente o por verdaderas estupideces...



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Respondiendo a Pinsapo.- Solitudine

Querido Pinsapo: no voy a darte argumentos, te relataré lo más brevemente posible lo que yo viví hace muy poco tiempo. Puede que el prelado sugiera una serie de cosas que él, por supuesto, no vive, pero no todos están dispuestos a seguir.

1.- Las meditaciones, los círculos breves siguen siendo infumables. No se habla de Cristo, ni del amor a la Eucaristía, ni del cariño a los demás. Se sigue hablando y diciendo las mismísimas cosas de hace 20, 30 y 40 años. Los retiros mensuales son bochornosos. No te digo nada del curso anual o de los cursos de retiro. Se habla del fundador, de corrección fraterna, de las faltas de pobreza. Los casoplones de la obra son una bofetada moral para la gente que menos tiene.

2.- En el comedor durante la comida, dije: he empezado a trabajar en un comedor social. Voy dos días a la semana toda la mañana. Trabajaré como voluntario en un centro de inmigrantes y los más desfavorecidos de la ciudad. Silencio sepulcral. Roto por el comentario de una persona como portavoz del resto: Pero, cómo, ¿que vas hacer qué? Iba a explicar de nuevo, y el director intervino: Bueno a los voluntarios que conozca los traerá a la labor. Me tuve que callar. ¿Eso es solidaridad, por parte de los del centro y por parte del director? Pues que baje Dios y lo vea. Eso es no entender absolutamente nada.

3.- A los pocos meses comencé a trabajar simultáneamente con otra ONG de la iglesia católica. Volví a intervenir contando lo contento que estaba porque habiendo empezado ya a colaborar, esa semana iría el vicario de la diócesis de Madrid a celebrar una Eucaristía para todos los voluntarios. Casi se marean. ¿Eucaristía? Vicario de la diócesis? Se hacían cruces. Yo no volví a contar nunca nada más.

Esas son las tres cosas que al final de tu carta enumeras. Y yo te doy mi experiencia.

NI el amor a Jesucristo es tema de charlas, círculos o meditaciones. Ni tener en el corazón el ánimo de ayudar a los que más lo necesitan. Ni la colaboración con los obispos y parroquias.

¿Y sabes por qué? La gente mayor no admite nada de esto. Y la gente "joven" están en los colegios intentando captar a los de 10, 12 años. Y muy ocupados en sacar adelante las actividades de los clubs aunque tengan 40, o 45 años. No Pinsapo. No estás en la realidad. Los centros de n mayores están así y los n jóvenes de la otra manera.

¿Si el prelado se dirige a los más jóvenes? Trabajan a destajo para sacar adelante a sus familias. Y se sigue con la política de familias numerosas. Conozco a muchos supernumerarios de 30, 35 años que ya tienen 5 hijos y van a por el sexto. Tú crees que tienen tiempo de solidaridad, de parroquias etc… Suficiente tienen con bañar a sus hijos cuando llegan a casa después del trabajo. Y por la noche a seguir cumpliendo con el "débito" matrimonial. La realidad del opus dei es esta. No hay más.

Me gustaría equivocarme. Pero por lo menos tienen que pasar dos o tres generaciones, desparecer n y agd y que los s, si pueden, se hagan cargo de todo.

La carta de febrero, es una utopía. El opus dei nunca se "hará" con los pobres y marginados. ¿Alguien ha visto al prelado ir a Lampedusa como hizo el Papa Francisco? ¿Alguien ha visto que abriera las puertas de San Eugenio los días más fríos de Roma como hizo el papa? Sí puede haber alguna labor social, pero en los centros hay como poco calefacción, agua caliente y comida servida en la mesa. ¿Saben qué es tratar a personas que no tienen nada y que con una palabra de cariño y una sonrisa se conforman? ¿Saben qué es saludar al Vicario de la diócesis y agradecerle la labor que estamos haciendo los voluntarios? eso no, no se hace en el opus dei.

Un saludo a todos

Solitudine





Éramos como los religiosos.- Gómez

«Isidoro estudió en el colegio de los hermanos maristas, que lo prepararon para la primera comunión, recibida cuando aún no había cumplido nueve años» (del Decreto sobre sus virtudes). ¿Y Escrivá no estudió también con los hermanos maristas? ¿Fue con los escolapios? Bueno, el caso es que yo, como Isidoro, estudié con los hermanos maristas. Él, en Logroño; yo, en Bogotá. Él, en 1911; yo, entre 1958 y 1968. Supongo que el estilo de los escolapios y de los hermanos maristas de Logroño en 1911 era muy parecido al de los hermanos maristas de Bogotá en los años 60, antes de la revolución del Vaticano II, la Teología de la Liberación, la píldora y la minifalda...



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Agradecimiento.- Carmenita

Querida Agustina,

Hace años que leo Opuslibros (más de 7), no tengo como agradecerte tu valentía y todo lo que has hecho por tantos.

Gracias a esta maravillosa página y a una mente activa que cuestiona y se plantea el porqué de las cosas (recetado en la "Cosa" como soberbia y falta de visión sobrenatural) logré escapar de las garras del opus.

Fui supernumeraria algunos años pero cuando me encontré con un vicario que me mandaba a condenarme por discrepar con él, algo ya no me sonó. Algún día daré más detalles.

Uno de los errores más graves que cometí después de salir de la Cosa fue el no poder separar a Dios del opus y sentir que renegar de Dios era renegar del opus. Pero en fin se agolpan muchas ideas en mi cabeza y me desvío de la razón primordial por la que les escribo.

Resulta que mi esposo sigue siendo supernumerario y es de los que no cuestiona nada, todo lo hace con una autenticidad robotizada. Pero en el fondo sé que hace las cosas porque es demasiado bueno y cree ciegamente que Dios le ha llamado al opus. No sé qué más hacer para que abra los ojos. Espero alguien me pueda orientar.

Un abrazo

CARMEN


 

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