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CORRESPONDENCIA

 

Lunes, 02 de Abril de 2018



Historias de Terror y de Dolor (III).- Salypimienta

Historias de Terror y de Dolor (III)

 

Me conmueve mucho cuando alguien deposita su confianza en mí y me cuenta su historia y me pide que la publique. Hay personas que quieren contar su historia y no saben cómo hacerlo, es por eso que me presto a ello. También es una forma de sanar, ver tu historia escrita por otro.

La siguiente historia es la de una ex numeraria auxiliar que dejó la Obra hace un par de años.

 

MARGARITA

Era muy jovencita cuando me hice del Opus Dei. Unas señoritas fueron a mi casa y convencieron a mis padres de que las dejaran llevarnos a mi hermana y a mí a su escuela. Que cuando acabaran nuestros estudios tendríamos trabajo seguro...



(Leer artículo completo...)




Carta abierta al Prelado (con copia al Papa Francisco).- Ramana

Estimado Sr. Ocáriz,

le voy a relatar una anécdota pero con vocación de categoría, dado que la actuación de este hijo suyo no obedece a una particular forma de ser o malquerencia sino que está imbuido del espíritu fundacional de la organización que usted preside: como se ha dicho muchas veces en estas páginas, es la propia estructura de pecado la que propicia y tolera este tipo de sucesos (lamentables, indignos), y no la mera e individual (y errada, claro) actuación de un miembro.

Un buen amigo acaba de perder a su padre, tras años de digna vejez, meses de enfermedad y semanas de agonía. Al cuidado de mi amigo y de su hija, su anciano padre ha vivido bien y feliz, querido, hasta que el cuerpo ha dicho basta. Así es la vida, nada que objetar. Se ha ido en paz, la misma que ha dejado a mi amigo y a su nieta, que se han desvivido con todo el amor hasta el final. Y aquí viene la parte que a usted le compete, o si no a usted, por delegación, a quien haga las veces en la región donde han tenido lugar estos acontecimientos.

Mi amigo tiene un hermano, miembro de su organización desde hace muchas décadas, que como agregado ha vivido siempre en casa de los padres (o por mejor decir, ha pernoctado, como gusta de especificar mi amigo, dado que jamás se ha ocupado de las cuestiones domésticas), cómoda situación que con la excusa de atender a sus mayores le permitía vivir de la sopa boba y gratis, como buen hijo suyo, numeroso y pobre… En un cierto momento, al padre de mi amigo, dada su avanzada edad e imposibilidad de valerse, lo trasladaron a un geriátrico donde ha pasado los últimos años. Pues bien, se cuentan con pocos dedos de una mano las veces se ha interesado por él yendo a verle, a sacarlo a pasear (¿) o a trasmitirle su cariño. Eso sí, ha seguido viviendo en el domicilio familiar, como si le perteneciera, y saqueando las cuentas del padre a espaldas del otro hermano, que iba a la residencia a diario a estar con el anciano.

Lo más grave ha sido en estos últimos meses, con un deterioro notable de la salud, más tres semanas de agonía en el hospital, su hijo agregado ni ha aparecido una sola vez, siquiera a despedirse de su padre, lo imagino muy ocupado en labores proselitistas, ejerciendo la caridad con las familias de otros y devanado en desgranar cuentas del rosario “encomendando” a su padre, a su hermano y a su sobrina, a la que ni llama, no digo visite, el día de su cumpleaños. “¿Sabes algo de tu hermano?, me cuenta que una vez le preguntó su padre, no hace tanto, “lo mismo que tú, papá”, y con una infinita tristeza en la mirada le contestó: “él se lo pierde”. Cierto, porque su hijo agregado, habiendo tratado así a su padre, tendrá que vivir con ello el resto de sus días.

Sr. Ocáriz, ¿es usted consciente de que no hablo de un caso aislado, particularmente grave y excéntrico, sino que le intento trasmitir, afectuosa y respetuosamente, con un ejemplo cercano y que conozco muy bien, la manera de obrar en el mundo de la mayoría de sus “hijos”? Este autismo enfermizo, este desprecio a los más prójimos (su padre, su hermano) no ha sorprendido a mi amigo porque ya lo conoce, pero a mí me ha dejado de piedra con la boca abierta, por eso le he pedido permiso para denunciar públicamente esta historia que, insisto, no es una mera anécdota, sino una angustiosa categoría que evidencia el modus operandi de la institución que usted preside.

Si hay más casos parecidos de tan fragante falta de caridad cristiana para con la familia “de sangre” (¡valiente remoquete!) me encantaría que se denunciasen en estas páginas, para que todo el mundo sepa la doble vida que se gastan los “hijos del Padre”. Atentamente

Ramana





Confundir las cosas.- Rocaberti

Buenas Pascuas a todos:

He leído, en los últimos escritos, situaciones en las que se manifiesta la dificultad de vivir una sexualidad amable y una vida matrimonial normal, debido a principios morales discutibles. Creo que, en parte, se debe a un clericalismo que lleva a poner bajo la jurisdicción del clérigo, aspectos que corresponden a la autonomía de la persona.

La religión, a lo largo de la historia, se ha adueñado de parcelas del conocimiento que no le eran propias: el papismo político, juicios científicos como el de Galileo, filología aplicada a textos eclesiásticos, etc. La sexualidad fundamentalmente es un tema para ser estudiado y enseñado por médicos y psicólogos y no por curas. Estos han causado muchas situaciones dramáticas, a veces trágicas, al considerar que el sexto mandamiento del catecismo del padre Astete lo resuelve todo. Mandamiento cuyo enunciado no equivale al texto bíblico, y que, por lo tanto, es un invento de algún teólogo.

La Obra es una organización clerical, pues no acepta la autonomía de las realidades humanas, y se mete en todo: sexualidad, economía, hasta en la forma de vestir. Clericalismo puro. Es preciso apartar a los clérigos de lo que no es su competencia, defender la autonomía personal, y, sobre todo, no permitir a los directores de la Obra meterse a dirigir la vida de las personas en lo que no es su competencia, prácticamente todo, excepto aspectos espirituales relativos a la piedad. Recuerdo que el fundador decía que se tenía que obedecer en todo, que no se tenían derechos. Yo dicho que esto es una mamarrachada, aunque sea muy santa, que no se puede obedecer en contra de la propia conciencia y que sí, se tienen derechos y obligaciones. Escrivá quería moldear a la gente como si fueran barro informe, sin considerar la dignidad de ser persona. Un abrazo.

Rocaberti.





Bueno, bonito y barato... ¿A caso el sexo es un juguete?.- Class

Para Erpayo.

JPII con la teología del cuerpo acabó de bordar la situación de los matrimonios en la Iglesia. Por suerte, como dijo Ana Azanza en “Humanae vitae 1968”, ”El 25 de julio de 1968 salió Humanae Vitae y fue para muchos católicos un momento histórico. ¿Más desastroso que el caso Galileo del XVII o el dogma de la infalibilidad del XIX? El Papa Pablo VI obvió el asesoramiento de la comisión que él mismo había creado: los únicos medios para espaciar los nacimientos son la abstinencia y el “método natural”, el uso del matrimonio no debe hacerse impidiendo los nacimientos. Millones ignoraron al Papa, continuaron practicando su fe y usando la píldora o cualquier otro medio anticonceptivo. Millones perdieron la paciencia y la fe. Otros se fueron en busca de curas más comprensivos, otros intentaron seguir la encíclica al pie de la letra y se encontraron con que evitando un pecado caían en otro, el divorcio. Fue Andrés Helleger, ginécologo y miembro de esa experta comisión reunida por Pablo VI el que dijo aquello de: “no puedo creer que la salvación se base en la anticoncepción por medio de medir la temperatura y la condenación se base en el látex.” El cardenal Felici por su parte apostilló: “el error ocasional del superior (el Papa) no autoriza a la desobediencia de los súbditos”.

Y estos millones de católicos que ignoraron al Papa, eran tan Iglesia como las presectas y movimientos radicales que auspició JPII.

No todo es tan simple como una funda de látex, la generosidad, o la nulidad… no seamos tan simplistas. Estas dos personas supernumerarías tenían una afectación vital en sus vidas, no podían seguir así o explotaban. La afectación era tal que iba desde la punta del pelo a la uña del pie, en toda su persona. Cuando entiendas esto, LA TEOLOGÍA DEL CUERPO te parecerá un juego de niños, una simplificación de lo más pueril de una realidad más compleja que incluso supera la ficción.

Por cierto el sexo es mucho más grande que algo bueno, bonito y barato. El sexo no es un juguete, que lo podamos tildar así.

Buena Pascua a todos

Class





Un Ejército aconfesional por la gracia de Dios.- Aloevera

Un Ejército aconfesional por la gracia de Dios

Defensa firma convenios con el Opus Dei y siete diócesis para reforzar a sus 83 capellanes castrenses

MIGUEL GONZÁLEZ 30 marzo 2018

Se apoya en una sentencia del Constitucional según la cual, “cuando una tradición religiosa se encuentra integrada [...] en un determinado colectivo, no cabe sostener que a través de ella los poderes públicos pretendan transmitir respaldo a postulados religiosos”. El argumento está traído por los pelos, pues la sentencia se refiere a un tema bien diferente: la proclamación de la Virgen como patrona del Colegio de Abogados de Sevilla.

Artículo completo en El País

 




 

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