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CORRESPONDENCIA

 

Miércoles, 15 de Julio de 2020



Sobre el Cuarto Mandamiento.- Imanol

Hace unos días una amiga me entregó una serie de cartas escritas por mi madre a la suya hace más de cuarenta años.

En una de ellas, fechada en marzo de 1980, mi madre escribe: “… el mes pasado fue mi cumpleaños y se presentó NN a comer dándonos la gran sorpresa. Llegó a la una y media y marchó a las tres y veinticinco. Nos supo a gloria pues no le habíamos visto desde octubre.”

Me resultó particularmente significativa, y dolorosa, la precisión de “… las tres y veinticinco”.

Yo era numerario y vivía a menos de 100 kilómetros. Mi madre falleció en junio de ese mismo año.

Imanol





¿Contradicciones?.- Plutone

En el colegio de mis primas…

Había un cura que no tenía parroquia.
Había monjas que decían que no eran monjas; eran no-monjas.
Había seños que no fumaban porque eran no-monjas.
Había niñas que decían que no eran niñas; eran no-niñas-no-monjas.
Había una capilla que no era una capilla.
Había madres que estaban deseando que sus hijas se fueran de su casa.
Había padres que no iban nunca a las tutorías porque se sentían incómodos por ser hombres; eran padres-no-tutoría.
Había un colegio fotocopia en la misma ciudad, y allí las que se sentían incómodas eran las madres; eran madres-no-tutoría.
Había unas seños más importantes que otras, aunque no fueran su tutora; eran tutoras-no-tutoras.
Había tutorías sobre los pecados que le habían contado al cura sin parroquia; eran una confesión-no-confesión.
Había seños que vivían en un club; eran seños-no-monjas.
Había un viaje a Roma al que solo podían ir las niñas que iban a estudiar al club de las seños; era un viaje del cole que no era del cole.
Había seños que llegaban en una furgoneta roja y se bajaban fuera de la cancela porque las demás mujeres de la furgoneta tenían prohibido entrar en el colegio; eran supuestas non-gratas.
Había convivencias a las que solo iban tres niñas, con el cura, una seño y dos mujeres de la furgoneta; eran convivencias-no-convivencia.
Había niñas enamoradas de aquellas mujeres de la furgoneta.
Había mujeres de la furgoneta que se pasaban toda la tarde con ellas.
Había niñas que les mentían a sus padres para convertirse en niñas-de-furgoneta.
Había niñas-de-furgoneta que de pronto se aficionaban a las faldas y a las misas.
Había, al lado de la no-capilla, una habitación pequeña en la que siempre encontraban vino y tabaco; era una salita-no-apta-para-menores en un colegio de menores.
Había una niña judía que se fue espantada a los dos días; era consecuencia del carácter no-ecuménico del colegio.
Había una directora que se fue por depresión cuando el colegio alcanzó el número máximo de alumnas; era la directora-no-directora.
Había una excursión de fin de estudios para que siguieran estudiando con otras no-monjas en una universidad-de-furgoneta.
Había en la no-capilla unas fotos de un cura con gafas que dijo que había recibido un mensaje de Dios, aunque también dijo que no se abrirían colegios.
Había, por tanto, un fundador-no-fundador.
Había que pagar por todo, hasta por esas fotos, porque el cura de las gafas había dicho que lo mejor es el apostolado-de-no-dar.
Había, también, una caridad-de-la-no-caridad y una amistad-de-la-no-amistad.
Había madres que llevaban en el monedero una foto de ese cura con gafas, que montó un tinglao-de-furgoneta para que lo iluminaran por detrás en esas fotos.
Había, en fin, un santo-no-santo que fundó-sin-fundar un colegio con niñas-no-niñas, seños-no-monjas y padres-no-tutoría después de recibir un mensaje-no-mensaje que un día escribió-y-luego-quemó para que la gente supiera-y-no-supiera lo que en aquella visión-no-visión había visto-y-no-visto.

En el colegio de mis primas les hablaron de aquel santo-no-santo, por ser el fundador-no-fundador del colegio.
Según afirman las seños-no-monjas, aquel cura afirmó ser un instrumento de Dios, de un Dios amigo de los pobres que de pronto le hizo ver que debía ocuparse de la élite.
Por lo visto-y-no-visto, ahí quedó la cosa. Y el resto fue de su cosecha.
Tras mucho llevarlo a la oración en una capilla-no-capilla, el santo-no-santo tuvo una visión preclara de la élite:
Sería una élite masculina, que no femenina; una élite que, al ser masculina, necesitaba de un servicio doméstico femenino; una élite que no era tal élite si no era guapa, joven, atractiva y estaba sana como una pera.
Y el buen hombre fundó la sección de mujeres, creó a las auxiliares y sacó de la élite de la élite a los que tenían diabetes, como él.

Mis primas dicen que sí, que el colegio es del Opus y el Opus es Dei porque son inescrutables.

Plutone




Treinta años abusando...- Carmen Charo

ENTREVISTA— Miguel G. F., víctima de abusos sexuales

"El sacerdote del Opus que abusó de mí lleva 30 años haciéndolo con chicos por toda España"

Miguel G.F, denunciante de Manuel Cociña, el primer cura del Opus Dei condenado por el Vaticano por abusos sexuales, considera la sentencia –cinco años de prohibición de predicar y dar confesiones– "una ridiculez" y al condenado, un peligro: "No puede seguir siendo sacerdote"

Jesús Bastante en religiondigital.com —14 de julio de 2020 22:32h

 

"Yo le preguntaría, ¿por qué a mí? Éramos ocho chicos, y a los que nos lo hizo fue a los que teníamos problemas familiares. Sabía que a mí me podía hacer lo que quisiera porque era más frágil que el resto". Miguel G.F., el denunciante de los abusos padecidos a manos de Manuel Cociña Abella, sacerdote numerario del Opus Dei residente en Granada, ha recibido, en su casa de Chile, la condena contra su abusador, la primera vez en la historia en la que el Vaticano sanciona a un clérigo de la Obra por esta causa.

Artículo completo en El Diario

 





Sentí culpa por que un santo me hiciera eso.- María Luisa

Primera condena por abusos en el Opus:

 

"Sentí culpa por que un santo me hiciera eso"

Miguel cuenta cómo sufrió tocamientos cuando tenía 18 años de parte de uno de los cargos más importantes de la Obra. Roma le ha dado la razón con una condena pionera en la orden

14/07/2020

Miguel decidió denunciar los abusos que sufrió con 18 años el día que su acosador le mandó una invitación de amistad por LinkedIn. “Fue hace dos años y lo que más me molestó es que ponía que estaba en Granada y era ‘profesor’, y no en Galicia, donde me habían asegurado que le apartarían de otros alumnos”.

 

La impunidad que se reflejaba en el perfil le animó, 20 años después, a hacer públicos los tocamientos que sufrió. Hace unos días, la Iglesia le ha dado la razón. Manuel Cociña Abella, cura numerario del Opus Dei y figura relevante en la Obra -cercano al propio Escrivá de Balaguer- se ha convertido en el primer miembro de esta orden declarado culpable de abusos sexuales por la Doctrina de la Fe del Vaticano.

 

Artículo completo en El Confidencial

 

 





EN CUATRO DÍAS MORIRÁS. CAPITULO XI.- Josefina Hurtado

 

 

El día 26 de Mayo del 2020 los jueces de la Audiencia Provincial de Murcia se volvieron a reunir. Esta era la tercera fecha, la no anunciada. Antes hubieron otras dos. Una el 18 de Junio del 2019, postergada por una razón, otra el 24 de Septiembre del 2019, postergada por otra.

 

En el auto utilizaron principalmente y como fundamento para la no revocación del archivo del caso las declaraciones de los forenses, de esos médicos forenses  que se llamaban a sí mismos, los peritos de la verdad: peritos a los que no solo denuncié ante el Ministerio de justicia sino también en los juzgados de Murcia por falso testimonio...

 

 

Artículo completo y documentación

 

 


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Cambiando la narrativa, hoy y siempre.- Al Chile

Esta entrevista realizada en el año 2016, al anterior consiliario del opus en México, la manda un numerario que dice no reconocer ya una prelatura así.

Éste sacerdote, tan afecto al Golf y a buscar “gente potente” para su beneficio, muy hábilmente decide pasar, hace unos años, a ser Delegado del prelado y poner un muchachito dúctil y sin carácter como consiliario para no tener a nadie que le vigile aquí y mandar a todos sin tener que dar cuentas, pues solamente depende del consejo general al que hace llegar a Roma sólo los temas que él desea se enteren los del Consejo.

Lo que permanece en la narrativa, historia o cuento que hacen en la prelatura, es el discurso de que no los entienden o que los tachan de ricos, secta y de derecha, elitistas. Eso sí permanece en el discurso, pero hay cosas que sorprenden por lo que dice quien lo dice.

Al final de la entrevista hago mis comentarios.

FRANCISCO NO ES EL PAPA DE LA IZQUIERDA

LA LUZ DEL MEDIODÍA estalla en los techos, los cofres, las puertas: los destellos metálicos de este lujo que encandila tienen marca. Mercedes Benz, Audi, BMW. La playa de estacionamiento en Santa Fe se ha colmado porque es hora de misa, y los empresarios y ejecutivos hacen una pausa en su industria de dinero para oír la palabra del Señor que aquí se escucha cada día a las 13:15. La Parroquia de San Josemaría Escrivá, corazón del Opus Dei en México, apunta hacia el cielo con imponente estirpe: como un cohete del futuro o una llama gigante. Adentro, el silencio sobrecogedor de un pasillo hace escuchar los propios pasos, que pasan junto a elegantes salas de juntas, comodísimas, impecables, acojinadas, cuyas puertas de vidrio tienen, sin excepción, frases que ilustran lo que el Opus Dei —está reservada y misteriosa Prelatura Personal que muchos se obstinan en llamar “secta”— le dice al mundo entero desde hace 88 años que se comenzó a expandir a todos los continentes...



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