nikita :
Cuando enfermas psicológicamente en
el opus Dei, no puedes hablarlo con nadie de la organización, salvo con tus
directores. Nadie te da la razón. Te sientes una persona incomprendida. He comprobado,
a lo largo de los años en los que enfermé, que existe un miedo que los
paraliza, un terror absoluto a saltarse alguna ley.
Como no hay ningún tipo de
comunicación, no sabes que está ocurriendo. Crees que los que te dañaron, al
medicarte equivocadamente, han errado sin mala intención. Piensas que el
sacerdote/numerario que se desdice de sus anteriores afirmaciones, no se
acuerda de lo dicho. Hasta intentas convencerte de que el siquiatra/miembro del
opus Dei que ha roto el secreto profesional, ha tenido un lapsus.
Pasan los años, muchos, y sabes que
todas esas circunstancias no son éticas. Lo sabes, pero callas. ¡Sólo me ha
pasado a mí!, piensas todo el tiempo… debo tener una mala suerte... Hasta
llegué a pensar que era muy raro que me tocaran a mí los que no sabían que era
la verdad y la ética.
Pero, cuando descubres esta web...
ves con claridad que todo lo que te ha pasado no ha sido un cúmulo de casualidades,
que no eres una persona idiota a la que algunos miembros de la obra se han
puesto de acuerdo para fastidiarte la vida. No. Es muchísimo peor el asunto: es
que así es la praxis del opus Dei.
Un auténtico horror. Es mi
testimonio.
Muchas gracias por existir!!! Así nos
damos cuenta que no sólo nos pasó a nosotros.
Nikita
Publicado el Wednesday, 29 January 2014
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