Bienvenido a Opuslibros
Inicio - Buscar - Envíos - Temas - Enlaces - Tu cuenta - Libros silenciados - Documentos Internos

     Opuslibros
¡Gracias a Dios, nos fuimos
Ir a la web 'clásica'

· FAQ
· Quienes somos
· La trampa de la vocación
· Contacta con nosotros si...
· Si quieres ayudar económicamente...
· Política de cookies

     Ayuda a Opuslibros

Si quieres colaborar económicamente para el mantenimiento de Opuslibros, puedes hacerlo

desde aquí


     Cookies
Utilizamos cookies propias y de terceros para obtener datos estadísticos de la navegación de nuestros usuarios y mejorar nuestros servicios. Si continúa navegando, consideramos que acepta su uso. Puede obtener más información aquí

     Principal
· Home
· Archivo por fecha
· Buscar
· Enlaces Web
· Envíos (para publicar)
· Login/Logout
· Ver por Temas

     Login
Nickname

Password

Registrate aquí. De forma anónima puedes leerlo todo. Para enviar escritos o correos para publicar, debes registrarte con un apodo, con tus iniciales o con tu nombre.

     Webs amigas

Opus-Info

NOPUS DEI (USA)

ODAN (USA)

Blog de Ana Azanza

Blog de Maripaz

OpusLibre-Français

OpusFrei-Deutsch


 Correos: Respuesta a Class.- Sinrencordenada

040. Después de marcharse
Sinrencordanada :

Querido Class. Leí tu correo y no te he podido contestar hasta ahora. No por falta de tiempo, sino porque me sorprendió tanto tu respuesta que, por ser justo, he querido leer más artículos tuyos (no todos pues, con leerte dos o tres artículos de diferentes años –llevas once años escribiendo-, ha sido suficiente).

Está muy bien que nos explicaras “cómo vives la pobreza”, y del control exhaustivo que tienes de las cosas que usas. Puestos a dar testimonio, te informo que yo ya “no vivo la pobreza”: lucho en la vida y, si tengo un reloj chulo, pues lo disfruto. Y le compro cosas bonitas a mi mujer porque se lo merece. Por cierto, yo sí enciendo la calefacción porque quiero que mi familia esté a gusto (para eso trabajamos). Pienso que, si le digo a mi mujer que voy a bajar la calefacción porque, te cito, “demasiado confort amodorra”, me manda a dormir al coche… sin calefacción.

No sé si a alguien le ha servido de utilidad la enumeración y el control que tienes del número de prendas de ropa que guardas en tu armario. Quizá alguno agradece tu testimonio. Yo no, te soy sincero. Lamento informarte que, lo que haces, y cómo estiras la ropa, es lo que hace todo el mundo, pero quizá sin tanto discernimiento, como nos cuentas que haces. Con una sonrisa te digo que estuve a punto de contar las camisas, trajes y corbatas que, para mi trabajo, tengo que usar. Obviamente no lo hice porque, citando de nuevo tus propias palabras, “me la refanfifla”. Me gusta ir siempre bien vestido y mi mujer ha modernizado mi armario de numerario que tenía. Le encanta que vista bien y yo me dejo hacer. Imagino que mis palabras, te vuelvo a citar -esto ya es un plagio-, “te la sudan”, pero seguro que más de uno está disfrutando con este escrito…

La verdad es que, cuando he publicado artículos en esta página, siempre me ha escrito gente estupenda (de la obra algunos, otro no, pero todos ellos con mucha educación), y hemos hablado, dialogado y, al final, hemos creado vínculos. Con algunos empieza a ser amistad, con otros, cercanía, respeto y comprensión. Eres la primera persona que me escribe en público y te lo agradezco. Pero, ciertamente, me desconciertas.

Permíteme darte un consejo. Si yo tengo un vecino y me interesa su vida, estaría siempre controlando sus horarios, sus hábitos, pondría el oído a ver cómo discuten o corrigen a sus hijos, o estaría pendiente de escuchar qué película están viendo. No me meto en sus vidas, pero nunca podré decir que mi vecino no me importa. Si no me importa, no estoy pendiente de él.

Te pongo otro ejemplo. En España (imagino que eres de aquí) es importante el fútbol, y yo soy de uno de los dos grandes equipos. Sufro por mi equipo y sufro si el eterno rival gana. Vamos, que hasta duermo mal. La gente se ríe conmigo por ese aspecto. Tan es así que el dueño del bar de al lado de mi trabajo entra a verme cuando mi equipo pierde, y nos echamos unas risas... Está claro que me afecta. Por eso, nunca podré decir que el eterno rival de mi equipo no me importa, porque es claro que sí. Me importa, y por eso estoy pendiente.

Mi consejo, por si te interesa: si algo no te importa, pasa de verdad. Si la obra no te importa, no leas los artículos que, con tanto respeto, se escriben aquí. Y si los lees, no contestes… Y si contestas, por favor, no pierdas la categoría, como has hecho al contestarme... No te lo mereces. No hace falta. Hazlo por ti.

Has salido de la obra, como yo. Pasa de ella, pero pasa de verdad. Ignórala. Desconecta del todo. Olvídate de ella. No sientas nada por ella, ni bueno ni malo. Siente por la obra lo mismo que siento yo por los equipos de fútbol de los países escandinavos, que no sé decirte ninguno ;-).

De verdad, hazlo, porque te lo mereces. Te envío un cordial saludo.

Quiero dar las gracias a Elena (alias aquilina), por sus palabras. Nunca pensaría que no hablas castellano, porque te expresas muy bien.

Sinrencordenada




Publicado el Wednesday, 12 February 2020



 
     Enlaces Relacionados
· Más Acerca de 040. Después de marcharse


Noticia más leída sobre 040. Después de marcharse:
El arte de amargarse la vida.- Paul Watzlawick


     Opciones

 Versión imprimible  Versión imprimible

 Respuestas y referencias a este artículo






Web site powered by PHP-Nuke

All logos and trademarks in this site are property of their respective owner. The comments are property of their posters, all the rest by me

Web site engine code is Copyright © 2003 by PHP-Nuke. All Rights Reserved. PHP-Nuke is Free Software released under the GNU/GPL license.
Página Generada en: 0.141 Segundos