Traducción de las conclusiones de la Comisión de Servicio

Mediterráneo, 3/03/2023

El pasado miércoles conocíamos, en esta web, las conclusiones a las que ha llegado la Comisión de Servicio que visitó recientemente la región del Plata. Dado que la institución es experta en el arte de decir sin decir y en hablar para no decir nada, me gustaría traducir dichas conclusiones al román paladino, ese concepto maravilloso que Gonzalo de Berceo definió como “el lenguaje en el que el pueblo habla a su vecino”, significando con ello que era la herramienta de comunicación por excelencia. El lector sabrá disculpar la digresión, es que no he podido resistirme.

Vamos a la traducción...

1.Damos muchas gracias a Dios por el trabajo de los días de la comisión de servicio extraordinaria, que no hubiera sido posible sin la visión sobrenatural y el esfuerzo de las muchas personas convocadas a las diferentes actividades y de todos las que, de algún modo, han participado. Se ha podido comprobar cuántos deseos de santidad hay en la región. A la fuerza ahorcan. Claro que participaron, ¿acaso tuvieron alternativa? También me impresiona que se “cuantifique” la visión sobrenatural y el deseo de santidad de las personas. Pase por el esfuerzo, pero ¿la visión sobrenatural y el deseo de santidad? ¿Eso no pertenece a la más íntima conciencia de cada uno?

2. Ha sido motivo de alegría ver que la reestructuración ha tenido un primer efecto de agilización de procesos, disminución de burocracia, dinamización de la labor de San Gabriel y un giro hacia un mayor apoyo a la iniciativa y espontaneidad de las personas. “Gente, funcionad desde la libertad, haced lo que os dé la gana, pero por favor, no os marchéis, y dejad a las supernumerarias en paz”. No puedo ni imaginar cómo debía ser antes, si en el año de gracia de 2023, los procesos se han agilizado y la burocracia ha disminuido.

3. Como prioridad inmediata, se percibe la necesidad de revitalizar la labor de San Miguel. Hace años que nadie pide la admisión como numeraria o agregada, las auxiliares están en vía de extinción. No hay relevo ni indicio alguno de que vaya a haberlo y, de verdad, no sabemos qué hacer para ponerle remedio. Nos animan a seguir trabajando en los siguientes ámbitos:

            a) elevar la visión sobrenatural de todas; cuidar la atención de la dirección espiritual, ayudarnos a cultivar una piedad más profunda, aprovechando mejor la predicación y los medios de formación; hay un desánimo general entre numerarias y agregadas, un sentimiento de decepción, de desilusión, contra el que hay que luchar como sea. No se analiza el porqué de este sentimiento, su causa y su origen, sólo se dice que hay que luchar contra él teniendo más visión sobrenatural.

            b) incidir especialmente en la formación doctrinal en temas como la esperanza en Dios, el abandono, el perdón, la pobreza cristiana en la Obra. Ayudará seguir trabajando las grandes líneas propuestas en las cartas del Padre: centralidad de Cristo, libertad, amistad, unidad de vocación explicando a fondo las diversas modalidades de entrega y fidelidad. Convendría detenerse de modo más detallado en los binomios: libertad-entrega y amistad-fraternidad; el controlar a las personas hasta la paranoia ha salido mal, mal, mal; vamos a dejarlas actuar desde una semi-libertad y a ver si conseguimos recuperar algo. Las personas se sienten profundamente solas, hay que decirles que se busquen amigas y funcionen como si fueran normales (ahora, a los 60, 70, tienen que empezar a cultivar amistades). Hay que incidir en que las personas de un centro son hermanas, no sabemos cómo aplicar eso a la realidad, pero hay que hacerlo porque el ambiente de los centros es dantesco, eso tiene que cambiar. Eso sí, no sabemos cómo. No tenemos ni idea.

            c) reflexionar sobre la misión de cada cl, ayudando a actuar con prudencia, flexibilidad y fortaleza, poder asumir en primera línea las situaciones personales, con la orientación, apoyo y cariño de las dr. Es preciso ir incorporando el estilo y las propuestas de las nuevas Experiencias de formación en el ámbito local, para ser cada día más conscientes de la propia misión y responsabilidad; Disculpará el lector que no traduzca este párrafo, pero es que no entiendo qué significa. Me recuerda la glosa de la Administración que publicaron en febrero 2022, en la que por elevar el lenguaje y dar categoría a la misión de la Administración, no se entendía una sola palabra. ¿Qué significa “asumir en primera línea las situaciones personales”? Las “situaciones personales” se las ha tenido que ventilar cada quien como mejor ha podido, con y sin medios, sin ayuda alguna de la institución, ni de los consejos locales, ni de nada. Si quien sufría “la situación personal” no era santo de la devoción de la directora, mejor tirarse directamente al río.

            d) fomentar en los centros una fraternidad muy sobrenatural y realista, generosa, que sabe ver lo que une más allá de las diferencias, generadora de vínculos profundos. Ayudarnos a detectar formalismos y actitudes individualistas, y eliminar cualquier tipo de murmuración. La vida en los centros es intolerable, la gente huye de ellos. TODO es un formalismo que no permite la vida, y las personas se han hartado, han dicho basta al mensaje “ser como eres no está bien, debes ser como la institución quiere que seas” y ahora se dedican a ser ellas mismas, con sus más y sus menos, y esas son las actitudes individualistas que hay que detectar, para eliminarlas. Seguimos sin aprender.  

4. Como es lógico, se percibe una preocupación general por la atención y sostenimiento de las mayores en Casa (de modo especial entre las agd). Aunque es un tema en el que se está trabajando, habrá que ver el modo de dar seguridad y encontrar soluciones realistas. Además, es necesario ahondar en la comprensión de la virtud de la pobreza y sus consecuencias prácticas. Si no las hubierais hecho pobres de solemnidad, ahora no lo serían. Si no las hubierais exprimido hasta no dejarles ni un solo céntimo, porque había que comprar una esmeralda para el sagrario del oratorio de los cinco ríos, ahora tendrían medios y no dependerían de la institución para comer, para vestirse, para ir al médico, para vivir. Lo que ahora recogéis es lo que sembrasteis acaparando hasta la obsesión y el delirio, buscando solo que dieran más, y más, y más, y más, sin daros cuenta de que llegaría un día en el que, por habérselo robado todo, no tendrían nada, y entonces, ley de vida es, para sobrevivir dependerían de la misma institución que se lo llevó todo. Se llama cosecha, y si ahora recogéis es porque antes sembrasteis.  

5. Nos animan también a dar un mayor impulso y dirección a la labor de San Rafael, favoreciendo sinergias entre dr y países que integran la región; poner foco en el estudio, la necesidad de forjar un carácter íntegro y adquirir prestigio profesional para poder transformar el mundo y llevarlo a Dios. Ay, qué risa. ¿Prestigio profesional? ¡Pero si cuando un estudiante pedía la admisión sus calificaciones bajaban en picado porque no podía dedicarse a estudiar! ¡Pero si sacabais a los profesionales de sus trabajos para ponerlos a hacer fotocopias, y a leer informes de conciencia, y las cartas al padre, en las delegaciones, y comisiones, y asesorías y qué sé yo! ¿Ahora os dais cuenta de que nunca debisteis sacarlos? Ay, qué risa.

6. Agradecen a cada una el trabajo realizado hasta ahora, y piden a san Josemaría que nos ayude a afrontar con gran esperanza el de los próximos años, para que la región del Plata siga dando muchos frutos en santidad y apostolado. No sé hasta qué punto os ayudará el santo, porque, esté donde esté, escuchará “funcionad por libre” y le crujirán los huesos, pero bueno. En algo tenéis razón, sin embargo: si no es con esperanza, aquí no hay quien siga. Os hace falta mucha esperanza, muchísima, porque no habéis aprendido.

Hasta aquí mi traducción de las conclusiones. La institución sigue huyendo hacia delante, pensando que el papa morirá y llegará otro que la comprenda y la quiera, sin darse cuenta de, o cambia, o acabarán intervenidos como la Orden de Malta. Y, dicho sea de paso, la tal intervención no ha sido culpa del papa, ni de la Santa Sede, no ha sido no comprender, no querer: ha sido, por parte de la Orden de Malta, no hacer caso a las indicaciones recibidas desde 2017. Al opus dei han empezado a llegarle indicaciones en el 2022. Si no hay cambios sustanciales, la intervención puede llegar antes del centenario.

Mediterráneo

“Las cosas que aquí se ven / ni los diablos las pensaron”– José Hernández, “El gaucho Martín Fierro”.