El discurso de Cipriani
Mensaje de Monseñor Cipriani en la Escuela Técnica del Ejército

por María Isabel Torres
agenciaperu.com
24-1-2001

(video) "Perdón, pero ¿esto está grabado en un circuito cerrado?, todo. Pero prometan no usarlo en ningún otro sitio que no sea en la Escuela; no quiero salir en Magaly. No van a filtrar esto."

Esta semana, agenciaperu.com tuvo acceso a un vídeo en el que Monseñor Cipriani dicta una conferencia en la Escuela Técnica del Ejército. Sin embargo, el discurso que utiliza mientras habla de valores como la lealtad y la fidelidad, no corresponde exactamente al de un flamante Cardenal.

EMINENCIA GRIS
Desde este domingo 20 de Enero, el Perú tiene un nuevo Cardenal. Con la designación del Arzobispo Juan Luis Cipriani por el Papa Juan Pablo II, se confirmó lo que en los últimos meses se había convertido en un rumor a voces. Sin embargo, lo que debió haber sido un motivo de alegría y orgullo, cayó como una bomba al interior de la Iglesia.

(video) "Yo comprendo que el Servicio de Inteligencia tiene que desarrollar espíritus mentirosos. Yo lo comprendo, porque tiene que ser gente que parece que esté en la luna y está siguiéndote de cerca, están informando todo."

Lo paradójico es que durante el régimen de Fujimori, el nuevo Cardenal sólo comprendió las razones de la dictadura. Su cercana relación con el gobierno, la cúpula militar y Vladimiro Montesinos lo han convertido en una oscura figura, aun dentro de la propia Iglesia Católica. Y aunque el propio obispo se apresuró en responder esta imputación, sus acciones y declaraciones lo delatan reiteradamente.

En 1993, Monseñor Juan Luis Cipriani presidió una comisión de Alto Nivel creada por Decreto Supremo para la coordinación de programas de apoyo social. Un año después, asumió el cargo de director de FONCODES, una entidad que funcionaba, sin fiscalización alguna, desde el Ministerio de la Presidencia.

Incluso cuando el gobierno de Alberto Fujimori caía y la corrupción del régimen se hacía evidente, Monseñor Cipriani opinaba que la decisión del presidente de convocar a nuevas elecciones lo enaltecía y dignificaba, mientras que las protestas del pueblo en la Plaza Mayor lo incomodaban. "Vienen, insultan y destrozan", decía Monseñor.

De igual forma, Cipriani no ha dudado en intervenir en más de una polémica defendiendo los intereses del gobierno, aún a favor de temas poco cristianos como la pena de muerte.

"No podemos permitir que por el miedo, el temor y la cobardía de unos cuantos, el país no apruebe la pena capital. No podemos temblar de miedo. El mundo cambia día a día y no a favor de los cobardes. (Expreso, 29 de Julio de 1993)

Un año después de ser descubiertas las masacres de La Cantuta y Barrios Altos, Monseñor Cipriani afirmaba:

"En un contexto violento como el de Ayacucho, las muertes, desapariciones y abusos son parte del enfrentamiento de la guerra. Los defensores de los derechos humanos le llamaron guerra sucia. Yo creo que la Fuerza Armada tuvo que utilizar estos mecanismos para conocer cómo y dónde ocurrían estos asuntos. Y cuando utilizaron estos medios, naturalmente hubo muertos de un lado y otro... ¿Y qué quieren, que uno dé marcha atrás a la historia? (Caretas, 14 de Abril de 1994)

Igualmente, su participación en el debate público fue notorio durante estas últimas elecciones. Acerca de los observadores internacionales, Cipriani declaraba:

"Yo respeto mucho a mister Carter, pero mister Carter fue un presidente de los Estados Unidos y nada más. Yo creo que el Perú es el Perú, entonces mister Carter no es Dios. Todos los observadores electorales son bienvenidos, pero para observar con respeto al Perú" (El Peruano, 13 de Febrero del 2000)

SIEMPRE POLÉMICO
Sin embargo, las opiniones y acciones de Monseñor Cipriani no se han limitado al plano del acontecer político. Durante los primeros meses de 1999, cuando asumió el cargo de Gran Canciller de la Universidad Católica, decidió ejercer un control más efectivo en la marcha de esa institución. Ante esta situación, alumnos de la Universidad lo declararon persona no grata y se organizaron para defender su autonomía.

De la misma manera reaccionó gran parte de la población cuando, el año pasado, Monseñor Cipriani manifestaba que los homosexuales no estaban contemplados en el plan de Dios.

No obstante, uno de los temas que más polémica produjo al interior de la Iglesia fue la participación del arzobispo limeño en la toma de la residencia del embajador japonés en 1997. Siempre se especuló que fue Monseñor Cipriani quien introdujo los micrófonos a la residencia. ¿Mentía entonces cuando afirmaba que no estaba de acuerdo con que se produjera una incursión militar?

Sin duda, Monseñor Cipriani se siente más a gusto como capellán que como soldado de Cristo. Frente a los militares, se relaja en medio de la conferencia:

(Video) "Me he hecho el propósito de estar muy limpio y respetuoso. Pero de vez en cuando hay que soltarles algo para que sintonicemos, porque a ustedes les gusta hablar así"

"A mí me gusta tomar unos tragos, pero el borracho es otra cosa. A veces me dicen: "Monseñor, un compromiso. No jodas, pues"

"Yo comprendo que estoy chocando con una tradición del Ejército, pero es una mierda de tradición. Lo siento mucho: no está bien."

"Los cómicos de la calle, el 99% son maricones, son drogadictos, son ladroncitos, el serrano al que le sacan la vuelta siempre. Son una burla de nuestro país."

"Y si ustedes le sacan la vuelta a su esposa son una mierda."

"Han perdido la cabeza, han dejado a la esposa, han dejado a los hijos y se han ido detrás de una, yo lo digo claro, de una puta"

"Por ejemplo, el 'comprendido', el 'sí señor', 'comprendido', 'permiso'. A mí me suena, con el perdón, me suena a hueveo. Lo ha hecho perfecto, me ha dicho: 'mi coronel' y por adentro: 'conchatumadre'."

FACTOR DE DIVISIÓN
Ha sido este doble discurso del Cardenal del Opus Dei el que ha generado malestar y enojo entre los feligreses. Sin embargo, son pocos los que se atreven a manifestar públicamente su desaprobación.

Fuentes cercanas al gobierno informaron a agenciaperu.com que hace unos días se habrían realizado gestiones informales desde la Cancillería para evitar la designación de Cipriani en la Santa Sede. Entonces, ¿por qué el Papa decidió escoger a Monseñor Cipriani, un sacerdote identificado con la dictadura y varias veces abucheado por la población?

La influencia del Opus Dei en los círculos más cércanos al poder católico en Roma sería la principal razón del nombramiento. Monseñor Cipriani se convertiría así en el primer Cardenal de esta agrupación.

En todo caso, esta decisión amenaza con acrecentar las diferencias que existen al interior de la Iglesia, diferencias que se hicieron más notorias por la posición democrática tomada por la Conferencia Episcopal del Perú, presidida por Monseñor Bambarén.

No obstante, lo que muchos fieles esperan, es que el polémico perfil de Monseñor Cipriani deje de ser una sombra al interior de la Iglesia Católica y que no se confunda a ésta con el proceder de su representante en Lima.

(video) "Prefiero decirles lo que tengo dentro. Lo que pienso les puede ser útil como personas. Les agradezco la paciencia y, eso sí, todas las objeciones, aquí, abiertas. Cuando acabe esta vaina dejen a toda mi familia tranquila, dejen al Opus Dei tranquilo."

http://www.agenciaperu.com/2001/ene/invest/cipriani.htm

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