Gracias a Dios, ¡nos fuimos!
Opus Dei: ¿un CAMINO a ninguna parte?

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CORRESPONDENCIA

 

Viernes, 18 de Junio de 2010



Aviso.- Agustina

AVISO

La actualización del lunes 21 de junio se hará a última hora del día

 





PLEGARIA DEL EX NUMERARI@ EN PARO.- Aquilina

Se me ha ocurrido, como hago de vez en cuando para averiguar si hay novedades, entrar en la pagina del Opus Dei, y me encontrado con una novena al fundador para encontrar, o mejorar el proprio trabajo, en esta temporada social tan difícil para muchos. Y he pensado que, como a muchos de nosotros no nos apetece mucho semejante devoción, pero al mismo tiempo nos caería muy bien rezar por nuestra situación profesional, a lo mejor puede servir otra plegaria, que he compuesto sacandola de mis más emotivos sentimientos de esta temporada larga ya casi un año. En el fondo, tengo la esperanza de que si el fundador ha logrado de alguna forma colarse en el Cielo (y la misericordia de Dios es muy grande!), tiene cierta obligación de reparar con los que nos fuimos, y quizá pueda lograr ayudarnos, no porque sea más o menos santo, sino porque Dios es bueno. En todo caso, mi plegaria está dirigida directamente a Dios, pués no confío en otras intercesiones. Si alguien consigue alguna gracia por el rezo de esta plegaria, no hace falta que se lo comunique a nadie, es suficiente que se lo agradezca a Dios.
(Aunque esté en plan de broma, mis sentimientos son muy serios).


Dios mío, que en los años más tempranos de mi vida has hecho brillar antes de mis ojos el ideal de la santificación por medio del trabajo,

y que has permitido que a causa de esto mi vida experimentara el sufrimiento fisico y moral, la decepción, la duda y el remordimiento, y la amargura,

que sacrificara, en el convincimento de que era Tu voluntad, el estudio profundo y riguroso y cualquier otro proyecto profesional,

que alienara mi conciencia aceptando de ver el Bien y el Mal a través del juicio y de la opinión de otros que nunca hubieran debido llevarse como patrones en mi intimidad y en mi alma,

y que también has sabido sacar de estas circustancias grandes bienes para mí,

enseñandome a valorar la Libertad, la Autodeterminación, la Resistencia a las adversidades, el apego a Tu proyecto hacia mí, la Responsabilidad hacia mi misma,

que me has hecho perder en la depresión y volver a encontrarme en la consciencia de mi misma,

que me has enseñado, por medio de todas estas vivencias, a apoyarme sobre mis piernas y a buscarte directamente en el centro de mi corazón,

Te ruego: ahora que otra vez el recorrido parece perderse en la imposibilidad de proveer a mi misma y a mis seres queridos, y de saber “quien soy” dentro de la sociedad civil y profesional,

ayudame a comprender la gran lección que ciertamente la vida quiere proporcionarme con estas vivencias,

librame de mi ego que pretende sentirse a toda costa victima y perseguido, y que se entretiene en autoconmiserarse,

concedeme la alegría de saber que comparto, aunque sólo en pequeña parte, un poco del sufrimiento que aplasta y apaga una porción tan grande de la humanidad

y el orgullo de pertenecer al grupo de los debiles y desarmados,

ayudame a aceptar con amor y paciencia Tu voluntad por todo el tiempo que permitirás esta situación, al mismo tiempo que pongo todos los medios para salir de la situación de necesidad en la que me encuentro,

y cuando juzgarás que ha llegado el momento justo, permiteme volver a desarrollar mi servicio dentro de la sociedad, con el objetivo de servir realmente a mis hermanos y construir responsablemente mi felicidad y la parte de Tu Reino que ya se encuentra presente, en el presente, en medio de nosotros.

Te lo pido por la unica intercesión de Jesucristo nuestro Señor.

Aquilina



Opuslibros: sí, sí, sí.- varacovama

Por si al pobre Canasta le ha quedado alguna duda, le doy mi motivo para estar por aquí: Cuando una directora de la delegación se enteró que estaba por estos lares me dio un consejo, me imagino que recibido del mismísimo Espíritu Santo:"Si te has ido de la obra, no vuelvas a pensar más en ella, no revuelvas en el pasado, no te interesa seguir con heridas abiertas, puedes hacerte daño a ti y a los de dentro"...

 

Menos mal que preferí escuchar directamente al Espíritu Santo y esto es lo que realmente decía:

 

Si te has ido de la obra, es necesario recomponerte despacio, no puedes hacer como si nada hubiera pasado. Necesitas pensar y reflexionar. Opuslibros puede ayudarte.

 

Aprende a mirar el pasado, pon las cosas en su sitio, confía en la misericordia de Dios, date el tiempo que necesites, pero no cierres las heridas con pus porque para que cicatricen bien, las heridas tienen que estar realmente limpias. Opuslibros puede ayudarte.

 

Si tienes coraje y corazón para ayudar a los que han salido y están mal y a los que están dentro y están sufriendo todo lo que tú sufriste, colabora con opuslibros porque es el modo más eficaz de poder hacer lo que esté en tu mano por ellos.

 

¡Ah! y también creí oír del mismísimo Espíritu Santo, pero no me atrevo a asegurarlo, que rezara para que la obra se autodestruyera cuanto antes, porque no tiene ningún tipo de arreglo. ¡Imposible reformarla!. falla en los cimientos...

 

En fin querido canasta... sólo te queda que te conteste alguien a tu primera pregunta, pero, tal vez, con tantas cosas importantes que tenemos que hacer, tu curiosidad tenga que esperar...

 

Saludos,

varacovama





Algunas cosas nuevas.- Nunca

Por razón de mi trabajo, tengo relación con un supernumerario ya mayor, así como con algunas personas de la labor de San Gabriel, realmente personas que este mismo supernumerario trata. Mi relación es estrictamente profesional. Además es un viejo amigo de mi padre que por ende no dejaré de tratar. Yo creo que fuera de él, las demás personas que me llego a topar de la Obra no pasa de que nos saludemos y ya. Nunca tuve amigos de verdad ahí, aun cuando yo creía que sí. De esta persona he aprendido que en realidad a los supernumerarios les dan la versión light del Opus, no saben el fondo de las cosas, y hay otras que parece que se les confunden. Pues me he enterado que en Hermosillo han abierto un nuevo centro. No supo bien explicarme cómo quedará el anterior y lo que me dijo se me hace muy raro, por lo menos para México que, en 30 años que tengo de conocer al Opus, nunca antes lo había visto. Me explico…



(Leer artículo completo...)




Otra faena más del Opus.- Crisol

Han llegado hasta estas cálidas tierras, las noticias de los sucesos en la universidad de Piura en Lima. La vicerrectora, supernumeraria con varios años en la obra, había trabajado en lo que era su instituto de hostelería, muy conocida, valorada y alabada por su profesionalidad en la sección de mujeres y en el resto del ámbito para alcanzar ese puesto. Además, por su posición (acaudalada familia limeña) aportaba generosamente al Opus Dei.  Dedicada de lleno a sus tareas en dicha obra corporativa, sacrificó incluso a su familia, para muestra un botón, su esposo le diagnosticaron cáncer y no lo pudo acompañar en su primera operación por atender las tareas de la universidad.

Con el tiempo su esposo recayó, tenía a su hijo enfermo, así que pidió al rector (numerario), una licencia de meses, pero se la negó y le pidió su renuncia, ella lo hizo vía electrónica, pero el flamante rector se la pidió por escrito. Ante este pedido, ella pidió consejo y la prudencia le llevo a asesorarse legalmente. Esto, por lo visto, causó gran revuelo en el fuero interno “opusiano” y cuando se preguntó al rector por su actuar, dijo que no estaba contento con el desempeño profesional de la supernumeraria en cuestión (antes nunca nadie cuestionó esto y en tantos años de trabajo para las obras corporativas), entonces se empezó a correr la voz de que la pobre estaba mal de la cabeza y se escuchó hasta de la boca del consiliario.

Lamentablemente las faltas de caridad no se quedaron allí, sino que se hicieron extensivas a sus hijos que están en los colegios de la obra. ¿No les parece conocida esta estrategia de desprestigio? Gracias a Dios tuvo asesoría legal, resguardó sus derechos. Ahora está en otra universidad y trabajando muy bien. No sé en qué situación quedó la afectada respecto al Opus Dei, pero, si se quedó, imagino que estarán en tarea de reconquista, como se dice por aquí “bailándole bonito”.

Crisol





Acerca del escrito de Haenobarbo.- JM

Acerca del escrito de Haenobarbo, me parece que los curas no podían trabajar en oficios médicos.

 

CIC 1917, 139-2

 

Can. 138. Clerici ab iis omnibus quae statum suum dedecent, prorsus abstineant: indecoras artes ne exerceant; aleatoriis ludis, pecunia exposita, ne vacent; arma ne gestent, nisi quando iusta timendi causa subsit; venationi ne indulgeant, clamorosant antem nunquam exerceant; tabernas aliaque similia loca sine necessitate aut alia iusta causa ab Ordinario loci probata ne ingrediantur.

 

Can. l39. par. 1. Ea etiam quae, licet non indecora a clericali tamen statu aliena sunt, vitent.

 

par. 2. Sine apostolico indulto medicinam vel chirurgiam ne exerceant; tabelliones seu publicos notarios nisi in Curia ecclesiastica, ne agant; officia publica, quae exercitium laicalis iurisdictionis vel administrationis secumferunt, ne assumant.

 

¿Alguna excepción en este caso?

 

JM





¿NATURALIDAD?.- Patalibre

Sólo contar una pequeña anécdota que me ha ocurrido esta misma mañana y habla por si misma de la falta de naturalidad, y de algo mucho más importante, ¿realmente le importamos algo a la gente de la obra?. Cuando nos preguntan ¿qué tal estamos? ¿les importa realmente eso? ¿cómo estamos?, paso a contarla:

Por motivos de trabajo he coincidido con una persona de la obra a la que hacía tiempo que no veía, tenemos buena relación y tengo que decir que ella es encantadora, sacrificada, entregada, y todo lo bueno que pueda tener una persona. Lo que he notado en ella es algo aprendido, algo "contagiado" desde dentro, por ese afán de que los que nos hemos ido, somos malos, infieles, desleales, etc... y mejor no "juntarnos" con ellos.

Nos hemos saludado cariñosamente como era de esperar, y después de las preguntas de rigor, me ha preguntado "y tú ¿qué tal estás?", intuí yo que era con algo más de fondo que un simple ¿qué tal?, por lo que me he apresurado a contestarle: Estupendamente, muy muy feliz.... desde que me he ido soy muy feliz. Le he querido argumentar algo los motivos de mi felicidad y enseguida he empezado a notar que se ponía nerviosa, incluso colorada.... y como a decirme que no hacía falta que le especificara... (tampoco le estaba contando nada escabroso ni mucho menos)... pero como si tuviera miedo ¿a que le ¿¿"convenciera"?? En fin, al irme sólo he pensado:  "una nota más de la inmadurez de la gente de la obra, pobres". La persona ronda los 50.

Otro tema: Adela, ¿sigues ahí? ¿nos escuchas?, me gustaría poder ayudarte, diste señales de estar pasándolo francamente mal,  no se si ya has dicho en la charla que te conectas a la web, ojalá hayas hecho caso a las voces de Carmen Charo y otras, y sigas ahí, leyéndonos.  

Un abrazo,

Patalibre





Soñar con la Verdad.- Carmen Charo

Queridos amigos, os invito a ver este video que os adjunto y luego, si os parece, leéis mis reflexiones acerca de lo que me inspiran, que tiene que ver con lo que decía el otro día sobre la verdad. Este tipo de situaciones creadas bienintencionada pero artificialmente con el único fin de hacer disfrutar, y que se han dado de forma parecida con coreografías preciosas en espacios públicos a mi me emocionan mucho, y me sugieren nuestro paso por el opus.

 

Vemos una cafetería llena de gente, cada quien metido en su conversación. De pronto suena la música y un  camarero de la barra comienza a cantar a pleno pulmón. Hay sorpresa. Ya llevamos unas cuantas, aunque no las hayamos vivido en primera persona, pero suelen ser desagradables: violencia en la calle, terrorismo o puede que nos acordemos hasta del horror en las torres gemelas de Nueva York. No pasa nada extraño o desagradable, y la gente se relaja. Todos ponen atención a lo que pasa. La gente empieza a sonreír y a compartir su satisfacción. Se va relajando el ambiente y se crea una unidad cálida y bonita porque las voces, la música surge de cualquier punto del local. En un santiamén se ha creado un único ambiente, una unidad especial entre todos, gente que no se conoce de nada pero que en ese momento comparte algo bello.

 

No sé en ellos, pero en mí correrían mil emociones distintas y todas positivas: qué bonito, cuánta gente agradable, nadie me pide nada sino que disfrute, no hay ningún interés oculto ni comercial ni de ningún tipo, todavía hay quien hace el bien porque sí, ¿por qué no montamos tres tiendas y nos quedamos así para siempre?...

 

Igual pensáis que exagero en lo que veo o vosotros mismos veis, pero un hecho así en una ciudad del norte de España, y especialmente en Pamplona (no sé si Ana Azanza compartirá mi opinión) o en mi querido pueblo Vitoria, (ciudades muy similares) tiene un mérito añadido por aquello de que somos más cortados y controlados que la media con todo lo que nos remueva emocionalmente, siendo capaces de mantener la cara seria y el cuerpo rígido mientras nos deshacemos por dentro de gustaaaaaaaazo. Puede que sea muy imaginativa pero a mi me emociona esto porque pienso que podríamos hacer que toda la vida fuera así. Es bonito ver en situaciones simples como esta, que aun conservamos la confianza, la capacidad de asombro con lo bello, que aun creemos que hay gente buena, desinteresada, generosa, limpia, de alma grande!.  Y me retrotrae al pasado... ¿No fue algo así lo que nos enamoró cuando nos acercamos al Opus Dei?: ese afán desinteresado de hacer el bien sin mirar a quien, esa alegría genuina, la espontaneidad absolutamente libre, la transparencia, la inocencia limpia, la capacidad de entusiasmo, la bondad de corazón, la confianza amplia y ausente de todo temor.... ¿Y qué quedó de todo eso?

 

El Opus Dei se dedica con verdadero ardor a matar estos valores en todos sus hijos, y en alguno consigue que no vuelvan a brotar nunca. Por eso denuncio al Opus Dei y no me cansaré nunca de denunciarlo, hasta que el Vaticano, que es el único que puede meterlo en vereda, decida querer escucharnos e investigar, y ojalá fuera por genuino amor a la Verdad que dicen predicar.

 

Un abrazo a  cada uno.

Carmen Charo




 

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