Una lettera senza risposta escribe fiorenzo2002

Dices “… perchè lascia intuire come sarebbe più vera e compiuta la stessa vita dell''istituzione se essa condividesse generosamente con gli storici e gli studiosi la documentazione in suo possesso”.

Caro Fiorenzo2002 eso no pasará nunca. Si lo hicieran significaría que admitirían en los demás la capacidad de analizar los hechos y los documentos con sentido histórico y, a la vez, con la libertad y corrección de espíritu suficientes como para distinguir lo accesorio de lo fundamental, lo que corresponde -por ejemplo- al espíritu fundacional de lo que es fruto solamente del momento histórico.

La obra vive una especie de paranoia institucional, ve agresiones por todas partes, todos somos malos, malísimos, que queremos dañarla. En Villatevere hay una pintura en la que se ve a la Virgen María protegiendo con su manto un pequeño monolito con el sello de la prelatura y, alrededor, una serie de piedras que una mano malévola ha disparado contra la obra para destruirla o dañarla. Esa pintura es la materialización de ese sentimiento paranoico. No niego que haya habido personas o instituciones que hayan intentado dañarla, pero, una cosa es que haya ocurrido y otra muy distinta que todos los externos solamente busquen hacerle daño, eso es paranoia.

No eres el primero en pedir acceso a esa documentación y, seguramente, tampoco serás el último … porque mucho tendrían que cambiar las cosas como para que se abrieran esos archivos históricos. Es curioso, por un lado te ensalzan la figura intelectual, moral y espiritual del fundador, incluso algunos comentando que es como un nuevo doctor de la Iglesia pero, por otro lado, solo dejan salir con cuentagotas algunos documentos. Es una auténtica contradicción, quieren -como decís vosotros- “avere la botte piena e la moglie ubriaca”, o lo uno o lo otro, pero las dos cosas a la vez es imposible.

Y esta paranoia institucional no es solo con los de fuera, que al límite podría entenderse si usamos las mismas categorías internas (los de fuera malos, tontos o las dos cosas a la vez), sino que es incluso con los de dentro. ¡¡ No se fían ni de los propios !! Todas esas cartas que, imagino, fueron escritas para mantener el buen espíritu y para que mejoraran los propios, pero que están bien guardadas no sea que alguien encuentre la quinta pata al gato y se escandalice. Raro, muy raro todo.

Parece que el archivo que hay de escritos históricos sobre o del fundador es solamente para uso de iniciados, mira lo que le pasó a Markus Tank cuando pescó fuera del archivo (al que no le dejan consultar) y la cariñosa y caritativa respuesta que le dio la ilustre Pilar Urbano. Es la cuadratura del círculo: no dejo acceder a los documentos que tengo y, a la vez, me quejo porque nadie reconoce la estatura del fundador o atacan a la obra usando datos recogidos en otros sitios y, por tanto, no autorizados por la inquisición interna.

La historia de la obra se escribirá solamente con los documentos que ellos quieran, por los autores e historiadores por ellos aprobados y se publicará lo que apruebe la censura. Triste el miedo a la verdad. Imagínate dentro de 50 años un historiador que quiera saber algo de los que dejaron la barca, se le darán los miles de cartas donde el firmante deje bien a la institución pero, por supuesto, no tendrá acceso a la carta que tú indicas, solamente a aquellas donde todo sean loas e inciensos a la querida madre guapa.

A pesar de todo con esperanza, un fuerte abrazo desde mi selva.

Zartan